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Todos los meses mi esposa y yo vamos a nuestro pueblo natal, que está a unos cientos de kilómetros de aquí, para esclarecer la verdad sobre Falun Dafa. Nuestra familia, amigos y viejos compañeros de clase están todos allí. En este proceso experimentamos un incidente sobrenatural.
Hace un mes fuimos a casa de mi hermana menor, también practicante de Falun Dafa, allí ella le dijo a mi esposa: “La esposa de nuestro primo, la señora Wang, tiene una enfermedad seria y está a punto de morir, la familia ya está preparando el funeral”. Al escuchar esto, me sentí muy conmocionado. La señora Wang tenía alrededor de 50 años, entonces ¿por qué estaba muriéndose? Mi esposa y yo decidimos visitarla. Fuimos a su casa y la encontramos acostada en la cama con su familia al lado. Nuestro primo al vernos llegar, levantó su voz y dijo: “Mi hermana y su esposo han venido a verte”. La mujer abrió sus ojos por un momento y luego los cerró. No tenía energía para mantenerlos abiertos. Sólo podía escuchar con los ojos cerrados. Todos empezaron a hablar de su enfermedad, comentando que tenía un problema en sus pulmones y su corazón y que podía morir en cualquier momento.
En ese momento, empecé a hablar sobre los increíbles efectos curativos de Falun Dafa y les expliqué de una manera especial lo que fue publicado en Clearwisdom.net sobre la salvación de Wang Yulan de una enfermedad mortal y otros relatos extraordinarios. La paciente abrió sus ojos y dijo: “Te creo, ¿puede salvarme Falun Dafa?” Le dijimos que el Maestro Li salva a todos los seres conscientes compasivamente y que en una conferencia dijo: “Aún cuando una persona común grita hoy "Falun Dafa es bueno", el Maestro lo protegerá...” (Enseñando y Explicando el Fa en la Conferencia Metropolitana del Fa en Nueva York) Al escuchar esto, la mujer dijo: “Yo creo, yo creo, yo creo”.
Al escuchar sus palabras, escribí “Falun Dafa es bueno” en dos pedazos de papel y los pegué en las paredes adyacentes de manera que ella los pudiera leer. Cuando lo vio dijo: “Definitivamente los leeré”. También nos mostró su agradecimiento por cuidar de ella. Le recordamos a su nuera, recientemente casada, que la cuidara bien. Cuando ya nos íbamos, su nuera corrió hacia nosotros y nos pidió que le diéramos una copia del texto principal de Falun Gong, Zhuan Falun, para que ella pudiera leérselo a su suegra.
La semana siguiente, ya estábamos de vuelta en nuestra casa. Llamamos a mi hermana menor y le preguntamos por la esposa de nuestro primo. Mi hermana dijo: “Ella ahora, se puede sentar y leer Zhuan Falun”. Nos sentimos realmente felices. Una semana más tarde, mi hermana nos contó que la señora Wang podía levantarse de su cama y caminar. En ese momento, también se encontraba con ella la hermana mayor de mi esposa y nos pidió el teléfono a la vez que nos comentaba, “¡tengo que agradecerles a los dos!”. Entonces mi esposa dijo: “Si quiere agradecerle a alguien, ¡agradézcale al Maestro Li y a Dafa!”, ella contestó: “Desde que se fueron la última vez, empecé a recitar "Falun Dafa es bueno", y mi esposo ha hecho lo mismo. También hemos leído algunos libros de Dafa. Ahora, nuestras enfermedades están mucho mejor. En el pasado, gastábamos todo el dinero que nuestros hijos nos daban en medicinas y no teníamos para comprar carne ni pescado. Ahora disfruto de buena comida y puedo descansar bien. No necesito tomar más esa medicina. Falun Dafa es realmente bueno”.
Pasaron dos semanas más y nos fuimos a visitar de nuevo nuestro pueblo natal. Fuimos a la casa de la familia Wang y la vimos sentada en su cama. Ella no sabía que decir cuando nos vio. Se había transformado completamente desde el mes anterior. El milagro de su recuperación conmocionó a toda la villa. Sin embargo, su familia estaba bajo mucha presión y tenían miedo de que si la gente del gobierno local se enteraba de esto, interferirían y traerían al seno de la familia algunos problemas. Nosotros les dijimos: “Dafa los salvó y esto es un hecho. Wang Yulan dio su número de teléfono a toda la gente. Ella puede resistir la presión y ustedes también deberían ser capaces. A la vista de los hechos, ellos no pueden hacer nada. Dejen que todos vean la verdad por sí mismos”. La espo:sa de mi primo interrumpió y dijo: “No tengo miedo. Estuve al borde de la muerte y volví a la vida. Diré la verdad”.
Versión en inglés disponible en :
www.clearharmony.net/articles/200406/20363.html
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