Una chica joven y su hermano experimentaron personalmente los milagros de Falun Dafa

Una practicante de Falun Dafa de la provincia de Liaoning explicó los hechos de la persecución a su joven hermana y a su cuñado. Después de saber la verdad la ayudaron a proteger los libros de Falun Dafa. También recuperaron documentos abandonados de Falun Gong y los entregaron a otras personas después de haberlos leído.

Un día el cuñado vio a alguien que intentaba quitar un cartel pegado en una pared. Fue hacia la persona y dijo: «No haga esto, la gente que tiene estas palabras sobre su pared será recompensada.» Otro día, vio a un practicante colgar una banderola con palabras positivas sobre Falun Dafa y a otra persona no lejos que iba a denunciarlo a la policía. El cuñado estaba muy disgustado y dijo a esta persona: «Eso no es asunto suyo.» La persona dijo que la banderola se encontraba justo frente a su casa. Él respondió: «Es una buena cosa. ¡Pero si usted hace algún mal a los practicantes de Falun Gong recibirá una retribución kármica!»

El cuñado a menudo tenía dolores de vientre. Una noche recibió un tratamiento urgente por el cual se le hizo pagar 1.000 yuanes (moneda china, 500 yuanes es la renta media mensual de un trabajador urbano en China). Su problema de estómago persistió hasta que trató a Falun Dafa con bondad. La joven hermana de la practicante estaba a punto de sufrir una operación por un cáncer del útero a la semana siguiente. En la víspera fue al hospital y la radio mostró que el tumor había desaparecido. El médico quedó muy sorprendido y le preguntó qué medicina había tomado. Dijo: «Ninguna, yo he recitado cada día «Falun Dafa es bueno». El médico no dijo una palabra y asintió con la cabeza. Entonces prosiguió diciendo «Falun Dafa ha salvado mi vida.»

Durante el último Nuevo Año Chino, cuando los amigos y parientes estaban reunidos, la hermana de la practicante ayudó a difundir el mensaje que creer que «Falun Dafa es bueno» beneficia a la gente. Recitar: «Falun Dafa es bueno» cada día elimina todas las enfermedades, hasta un cáncer de útero. Esta experiencia convenció a muchos de los presentes sobre la grandeza de Dafa. Esa noche todos recitaron juntos una docena de veces "Falun Dafa es bueno".