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El 08 de junio de 2013, el diario italiano "La Stampa", publicó un artículo titulado, "bomba sobre los Derechos Humanos en China", escrito por el periodista Paolo Mastrolilli. El artículo es sobre el documental Free China (China Libre), en el que se destaca la persecución a Falun Gong por el partido comunista chino (PCCh) y el tema de la sustracción de órganos a practicantes de Falun Gong vivos.
La película abarca las experiencias de dos practicantes de Falun Gong que habían sido encarcelados en campos de trabajos forzados chinos. Estos campos sin escrúpulos se dedican a la práctica de sustracción de órganos de prisioneros vivos, luego los venden a los extranjeros que viajan a China como "turismo de trasplante". El artículo recordó a China que el mundo tiene presente los abusos a los derechos humanos.
Cuando Kean Wong, el productor de la película, se reunió con Jennifer Zeng, una madre, practicante de Falun Gong y ex miembro del PCCh, ella le dijo que había estado encarcelada en un campo de trabajo por su fe y que fue brutalmente torturada. Cuando ella ya no estaba en condiciones de soportar el dolor, accedió a la presión bajo coacción de no practicar más Falun Gong.
Kean después ayudó a Zeng a obtener asilo en Australia y escribió su autobiografía. Cuando Kean se reunió con Michael Perlman, el director y productor del documental, "Tíbet: Más allá del miedo", le contó sobre la historia de Zeng.
El Sr. Perlman acordó trabajar en el documental con Kean y añade un tema adicional del Dr. Charles Lee, un médico chino norteamericano. El Dr. Lee fue encarcelado en China por tratar de difundir vídeos en la red de televisión por cable estatal china, vídeos que detallan la persecución ilegal a Falun Gong por el régimen.
En el artículo de "La Stampa" indicaba, que el estreno del documental hará que el presidente de China Xi Jinping se sentirá por lo menos un poco incómodo. En el estreno, los dos personajes principales en el documental, Jennifer Zeng y el Dr. Charles Lee, se reunieron con el público. Zeng contó un poco sobre su experiencia en el campo de trabajos forzados chino.
"El primer día que llegué al campo de trabajo, me ordenaron que me pusiera en cuclillas durante 16 horas", explicó Zeng. "Después de que los guardias me golpearon y torturaron, me hicieron un examen médico completo, que me pareció bastante extraño. En realidad, el examen médico se llevó a cabo en preparación para la sustracción forzada de órganos".
Zeng también habló sobre la agonía de ser obligada a renunciar a su creencia en Falun Gong. "Yo accedí, con el fin de estar con mi hija", dijo "sin embargo, los guardias consideraron que había traicionado mi propia conciencia".
"La noche antes de ser liberada", dijo, "se me ordenó supervisar a una joven de 19 años que se había negado a ser transformada. Tenía muchas ganas de llorar. A pesar de que estaba contenta de abandonar el campo, yo sabía que esta joven iba a ser brutalmente torturada hasta que los guardias quebraran su voluntad".
El Director Perlman es de la opinión de que no debemos hacer negocios con China porque incluso el más básico de los derechos humanos no está protegido. Él sugiere que las personas firmen una petición para que se ponga fin a la persecución de Falun Gong.
Versión en chino disponible en: http://www.minghui.org/mh/articles/2013/6/12/意大利主流媒体刊登文章介绍《自由中国》-275266.html
Versión en inglés disponible en: http://en.minghui.org/html/articles/2013/6/20/140583.html
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