Compañeros practicantes: no descuiden el ejercicio matinal

Con la ayuda de compañeros practicantes, decidí empezar mi cultivación de cero y convertirme en un practicante verdadero. He estado prestando mucha atención al xinxing. He fijado estrictos requisitos para mí. Pude superar la mayor parte del ye de enfermedad sin problemas, en el peor de los casos duraba sólo unos días. Aunque sin darme cuenta, no estaba prestando atención al ejercicio matinal. A veces hacía una sesión de ejercicios durante el día, pero no mantenía la constancia. Tenía apego a la comodidad.

En septiembre de 2013, se me presentó la tos. Envié pensamientos rectos, y miré hacia adentro para identificar mis fallas de xinxing. Sin embargo, mi tos sólo empeoró. Estaba interfiriendo con mi trabajo, sueño y el estudio del Fa. Esto continuó durante un mes.

Una vez, la compañera practicante A me dijo: "mira hacia adentro". Le dije: "Lo hice, también envié pensamientos rectos, pero no funcionó". Luego me dijo: "Quizás tiene que ver con tus acciones. ¿Estas haciendo los ejercicios grupales por la mañana? El campo de energía es bueno cuando muchos practicantes están juntos. Esto puede ayudar a eliminar tu apego a la comodidad, y reforzar tu energía". Estuve de acuerdo. Sería bueno sumarme a la práctica grupal de ejercicios matinales, pero no me resultaba fácil levantarme temprano. De hecho, mi apego a la comodidad era mucho más grande de lo que había pensado.

A la mañana siguiente, no me levanté para hacer los ejercicios, y mi tos continuó. La practicante A llegó cerca de las 9:00 a.m. y quería que vaya con ella a la casa del practicante B. Estaba desganado, pero fui de todos modos. El practicante B también me habló sobre practicar los ejercicios juntos por la mañana, y dijo que todos los compañeros practicantes se juntaban allí para hacer los ejercicios. Vi la brecha entre mí y todos ellos. ¿Por qué no superaba el apego a la comodidad? Me decidí y comencé a aparecer por las mañanas para hacer los ejercicios. Los días subsiguientes mi tos empeoró. Tenía problemas al dormir. Pero sabía que era el mal que quería evitar que hiciera los ejercicios por las mañanas. Me mantuve diligente y le dije a Shifu que continuaría levantándome para hacer los ejercicios y que no dejaría que el mal me interfiriera. Cuatro días más tarde, mi tos se había ido por completo.

Shifu sabe todo y cuando estamos determinados, e ignoramos el mal, con este corazón firme, Shifu nos ayuda. Compañeros practicantes, si reconocen este apego en ustedes, los aliento a participar de los ejercicios matinales. ¿Cómo lograrán la consumación con el apego a disfrutar del tiempo libre? ¡Cultivemonos genuinamente desde ahora!

¡Gracias Shifu, por su guía y cuidado!

¡Gracias compañeros practicantes por su ayuda!