548 carteles revelan los hechos fuera de una clase de lavado de cerebro

El 26 y 27 de septiembre de 2002, antes del decimosexto Congreso del Partido, los practicantes de Dafa de Kaifeng en la Provincia de Henan fueron forzados a clases de lavado cerebral o enviados a centros de detención. Un mes y medio después, el 15 de noviembre, la oficina “610” en Kaifeng tomó a su cargo todas las clases de lavado cerebral del distrito. Mantuvieron la cuarta clase de lavado cerebral de Kaifeng y continuaron persiguiendo practicantes de Dafa. El 8 de diciembre, la clase se mudó secretamente al departamento de salud en el distrito norte. Planearon detener a veintidós practicantes por tiempo ilimitado. No dejaron que los practicantes salgan del edificio. La gente que los estaba vigilando tuvo que traerles comida. (La “oficina 610” es una agencia específicamente creada para perseguir a Falun Gong, con poder absoluto sobre cada nivel de administración en el Partido y en todos los otros sistemas políticos y judiciales).

A los miembros de la familia de los practicantes no se les permitía visitarlos sin un permiso escrito. Los oficiales buscaron enfurecidamente libros y artículos del Maestro Li. A los practicantes a los que se les encontró cualquiera de ellos se les puso en pequeñas celdas, se les golpeó brutalmente y se les prohibió comer o dormir. También se los torturó obligándoles a mantenerse de pie por largo tiempo.

Por la recta conducta de los practicantes, se ganaron los corazones de aquellos que los vigilaban. Al final, los oficiales transmitieron a los practicantes todas las noticias de afuera.

En la mañana del 23 de diciembre de 2003, la policía encontró un cartel de 4 metros colgando de un árbol cercano al departamento de salud. El cartel tenía letras rojas y fondo blanco y era muy llamativo. Se leía, “Falun Dafa es grandioso” y otras frases similares. La última frase era “Discípulos de Dafa están detenidos aquí”. La oficina 610 y los miembros del comité legal entraron en pánico y pusieron a más policías para patrullar durante la noche. La gente malvada de la clase se alteraba mucho con esto y al mismo tiempo los practicantes de Dafa detenidos se llenaban de valor.

En la tarde del 21 de febrero de 2003, uno de los que los vigilaba dijo: “Es realmente un milagro. No vi nada a la tarde después del almuerzo. Más tarde salí a comprar algo y volví después de la una. Entonces encontré que a lo largo de un trecho de 1/3 de milla de la ruta en frente del edificio, colgaban carteles rojos en todos los árboles. Los oficiales estaban en frenesí. Descolgaron los carteles uno por uno, un total de 548 fueron apilados en un auto. No podían entender como alguien había podido deslizarse entre ellos y colgado tantos carteles, ¿cómo podrían haber sido tan rápidos?

Traducido del inglés: http://www.clearharmony.net/articles/200308/14296.html