Bao Shuya recomienda a Guan Zhong para ser Primer Ministro. (Ilustrado por Zhiching Chen/La Gran Época) |
Bao Shuya era un funcionario del Estado de Qi, reconocido por ser un juez talentoso durante el período de primavera y otoño. Bao fue amigo de toda la vida de Guan Zhong y gracias a su recomendación, Guan Zhong fue capaz de hacer que el duque Huan de Qi fuese la primera hegemonía de la alianza de vasallos, como reconocimiento del poder del Estado de Qi.
En principio, el duque Huan de Qi le había pedido a Bao Shuya que fuese el Primer Ministro, pero Bao recomendó a Guan Zhong en su lugar. "Guan es más conveniente que yo, replicaba Bao. Él me ha superado en su capacidad de amar a la gente, nunca abusa del poder, es digno de confianza, garantiza la ley y el orden y dirige al ejército".
Sin embargo, el duque Huan guardaba resentimientos hacia Guan ya que en una oportunidad, Guan puso en marcha un plan para asesinarlo, aunque falló por poco. Ante esto Bao respondió: "En ese entonces, Guan servía a su enemigo y por eso concibió el plan de asesinarlo, pero era por la lealtad que le tenía a su señor. Si pudiera eximirlo y acomodarlo con gran respeto, le serviría con todos sus talentos y gran lealtad". Gracias a la persuasión de Bao, Huan renunció a su plan de venganza y más tarde le nombró como su Primer Ministro.
Bajo el gobierno de Guan, el Estado de Qi se convirtió en el estado más poderoso, pero posteriormente Guan contrajo una enfermedad terminal. En aquel tiempo, el duque Huan le visitó para discutir acerca de sus sucesores y como entre los favoritos estaba Bao Shuya, le pidió que le diera una opinión de su viejo amigo, a lo que Guan respondió: "Bao Shuya es una persona muy justa, pero espera que el resto se comporte de la misma manera. Un primer ministro tiene que ser tolerante".
Alguien filtró el comentario de Guan para provocar a Bao: "No solo por tu recomendación Guan Zhong quedó exento de las represalias, sino que también fue designado como Primer Ministro. En cambio, en lugar de recompensarlo a él, desalentó al duque de nombrarlo como el próximo Primer Ministro". Bao se rió de las habladurías y dijo: "Guan antepone el interés público por encima de la amistad personal. Esa es la razón por la que lo recomendé en primer lugar".
Bao Shuya y Guan Zhong fueron amigos durante toda su vida. Guan dijo una vez: "Bao y yo éramos socios de trabajo cuando éramos jóvenes. Cuando dividíamos nuestros beneficios, siempre tomé más y Bao nunca pensó que era codicioso; él sabía que mi familia era pobre. Cuando obtuve pérdidas en el negocio, Bao nunca me culpó, sólo dijo que el mercado no estaba preparado. Yo fui saqueado varias veces por los duques, pero Bao nunca pensó que era mi culpa. Escapé del campo de batalla unas cuantas veces y Bao nunca me tomó como un cobarde ya que él sabía que tenía que cuidar de mi anciana madre que estaba sola en casa. Cuando me rendí al duque Huan, después del fallido golpe de estado, Bao no se avergonzó de mí, pues sabía que mi sueño era servir al estado y ganar la gloria. Mis padres me dieron la vida, pero sólo Bao Shuya realmente me comprende".
Bao Shuya puso el interés público por encima de los suyos y recomendó a Guan Zhong como Primer Ministro. Durante ese período agitado de la historia de China, ellos confiaron el uno en el otro durante toda la vida. Así fue como se acuñó el proverbio chino "La amistad de Guan y Bao".
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