Unos días más tarde, por la noche cuando los practicantes se reunieron en casa para estudiar Dafa, vinieron 2 visitantes, una de ellos es la directora. Los practicantes los dejaron entrar educadamente a casa. La directora comenzó diciendo: me preocupaba pensar si no me abríais la puerta, seria una vergüenza para mí. Lo que me contaste el otro día me conmovió muchísimo, por eso, traigo conmigo otro director de Administración de Comunidad Residencial de otro distrito, también para escuchar la verdad.
Después de escuchar la clarificación de verdad, la directora dijo: la primera vez que nos vimos, quería ´convertirte´, pero ahora tu me haz ´convertido´ a mí. Los tres reímos. También dijo: si sigo aquí y si hay alguna nueva política o acciones por parte de las autoridades, os llamaremos para avisaros, así podréis salir de casa y no ser detenidos.
Los practicantes les dijeron: Qué buena es esta conversación. Ahora que estás protegiendo a los practicantes de Dafa, disfrutarás muy buena suerte, eso lo sabrás en el futuro seguramente.
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