Del 23 de agosto al 13 de septiembre, un practicante suizo fue a la ciudad de Olbia, en la isla de Cerdeña al sur de Italia. Cada mañana practicó los ejercicios de Falun Gong en un parque e instaló una serie de paneles para que los transeúntes pudieran leer sobre Falun Gong y la persecución en China.
Por la mañana temprano, pasando por el parque, dos policías leyeron atentamente las informaciones sobre los tablones. Después de tener una breve discusión con el practicante, le felicitaron por la magnífica información y particularmente por enseñar a los habitantes los ejercicios de Falun Gong gratuitamente y hablarles de la persecución en China.
Un póster presentando a Falun Gong fue instalado en el centro ciudad de Olbia. Las autoridades también dieron autorización para que se pudieran poner también en el hotel de la ciudad y a la entrada de la comisaría. Además, el gobernador de la provincia de Sassari habló personalmente con el practicante a propósito del genocidio contra las personas que practican Falun Gong en China. Sassari es la capital de Cerdeña. El gobernador se quedó sorprendido de que el practicante viniera así, de improviso y hubiera facilitado información sin pedir nada a cambio. Este practicante fue presentado calurosamente al ministro de cultura porque el gobernador pensó que también necesitaba conocer Falun Gong.
Una actividad a pequeña escala para promover Falun Gong fue llevada a cabo sobre la Piazza de la ciudad de Olbia el 2 de septiembre. El practicante de Suiza presentó una petición y pagó la tasa pero el permiso no fue admitido por que necesitaba ser firmado por un alto funcionario que estaba vacante y no había nadie en el departamento autorizado para firmar en su nombre. Alguien sugirió que la actividad se hiciera sin autorización. Esperando el permiso, el practicante habló a los funcionarios de la persecución de Falun Gong en China. También dijo que la actividad no se efectuaría sin autorización, pensando que esto iría en contra del principio de "Verdad". El ministro de cultura llevó pues este asunto a otro alto funcionario y este último firmó personalmente la autorización aunque no era el responsable de esta cuestión.
La actividad se celebró como estaba previsto y el resultado fue bueno. Algunos periodistas de prensa locales de Olbia vinieron para entrevistar a los practicantes de Falun Gong. Dos periódicos informaron sobre los sitios de práctica de los ejercicios gratuitos de Falun Gong en Cerdeña y de la persecución en China.
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