Chile: Gira por el sur ( 2ª parte)

El día 25 de noviembre, después del almuerzo, dejamos Rancagua con destino a Chillán, ciudad más al sur donde también reside un practicante de Dafa con el que intentamos contactar.

Llegamos al atardecer, después de mucho preguntar y buscar, finalmente encontramos la casa del practicante pero él no se encontraba en la ciudad ya que no nos esperaba porque no habíamos conseguido contactar telefónicamente. Al segundo intento encontramos un hotel donde alojarnos, dándose la circunstancia de que el propietario es descendiente de paisanos de uno de nosotros. Este vínculo nos facilitó el encuentro con los principales medios de comunicación de la ciudad, que justamente están integrados en una misma empresa que engloba prensa, radio y televisión, el director de la cual es amigo suyo. De esta manera, al día siguiente, nos reciben y nos dan la oportunidad de explicar a la audiencia y a los lectores la realidad de esta gran disciplina oriental desconocida para ellos, están asombrados de que todo lo que se hace en ella sea de forma altruista y gratuita, asimismo, tanto el locutor como la periodista muestran mucho interés por el grave episodio de la persecución en China, las torturas y los asesinatos, ya que hace unas pocas décadas Chile sufrió la represión de la dictadura.

Todo quedó explicado en la radio, en el diario La Discusión y en el canal local de noticias TV-U. Por la mañana temprano habíamos salido a la calle a repartir volantes y una de las personas que lo aceptó muy agradecido resultó ser el locutor de radio al que después conocimos en la emisora. La periodista nos acompañó a la plaza y nos tomó una fotos mientras hacíamos una demostración de los ejercicios para un artículo que quería escribir, lo que despertó la curiosidad de muchos transeúntes.

Después decidimos quedarnos en la plaza principal del centro urbano y hacer allí la práctica completa de los ejercicios y repartir folletos a los ciudadanos.
Mucha gente pidió información y unos escolares de primera etapa que iban con su maestra se acercaron muy mucho, todos tomaron folletos e intentaron aprender los ejercicios imitando alegremente los movimientos.
Poco antes de marcharnos apareció Julio, el practicante que no pudimos contactar y también un nuevo practicante con su hijo, así que pudimos conocernos e intercambiar nuestras experiencias.