Wei Zheng llega a creer en la Voluntad Celestial

Wei Zheng

Wei Zheng fue un Pu She [un rango a nivel ministerial en el Departamento Administrativo del gobierno del emperador] en la Dinastía Tang. Un día, cuando se acababa de acostar para tomar una siesta, dos oficiales del gobierno (de menor jerarquía) se pararon a charlar fuera de la habitación frente a su ventana. Uno de ellos dijo: “nuestras promociones están decididas por este viejo hombre [Wei Zheng].” El otro no estuvo de acuerdo: “No, todo está decidido por el cielo.” Luego de escuchar este intercambio, Wei Zheng escribió una carta y le pidió al hombre que le llamó “viejo hombre” que llevara la carta a la oficina de Shi Lang en el ministerio de Personal Civil. Este no tenía idea de que en la carta se leía: “dele una promoción a este hombre.” Desafortunadamente, tan pronto como puso un pie fuera del Departamento Administrativo, empezó a sufrir una indigestión así que le pidió al otro oficial que fuera por él a hacer el encargo.

Al día siguiente el Ministro del Personal Civil dictó una notificación especial que promovía al hombre que creía que “todo era decidido por el cielo.” Wei Zheng estaba perplejo cuando leyó esta notificación, entonces interrogó a los dos hombres. Cuando Wei Zheng supo que el otro hombre había entregado la carta en lugar del hombre que él había planeado promover, él soltó un gran suspiro y dijo: “¡Parece que es verdad que todo, incluida la carrera de uno, es determinada por los cielos!”

¿Cómo es que los Dioses determinan nuestras vidas? Una cosa es segura. Está guiado por un estricto estándar. Los Dioses recompensarán a un hombre basado en la cantidad de virtud traída de vidas anteriores. La virtud de uno determina todo. Este es el porque el pueblo chino siempre se recuerdan unos a otros que acumulen virtudes haciendo cosas buenas, y que no hagan cosas malas.

Fuente: Anécdotas del Antiguo Gobierno Chino (o Chao Ye Jian Zai en Chino.)