Reino Unido: Cada vez más occidentales se enteran de la verdad y apelan por el fin de la persecución

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Los practicantes de Falun Gong del Reino Unido continuaron con sus esfuerzos para despertar las conciencias en el centro de Londres. Durante varios fines de semana consecutivos, en St. Martín Square, al lado de Trafalgar Square expusieron fotos, hicieron la demostración de las cinco series de ejercicios de Falun Gong, distribuyeron información y recogieron firmas. Deseaban que además de que más gente en el Reino Unido conozca Falun Gong, sean informados sobre la persecución que soportan los practicantes en China continental y puedan firmar la petición que apela por su final. Un flujo continuo de gente que venía de todas direcciones era recibido con la banderola “Falun Gong es perseguido en China”. De sus conversaciones cortas con los que se paraban para leer la información fijada y firmar la petición, los practicantes comprendieron que cada vez más occidentales conocían la verdad a propósito de Falun Gong. Eran numerosos los que condenaban la persecución de diferentes maneras eligiendo para sí mismos un bello futuro.

Un señor mayor aceptó un folleto amistosamente. Cuando se le pidió si quería firmar la petición respondió: “Les apoyo. Ya firmé la petición dos veces antes. Estoy de su parte” Una señora fue a firmar directamente la petición diciéndoles a los practicantes que practicaba yoga. Había oído hablar de Falun Gong, sabía que era bueno y que es perseguido en China. Había venido para asistir a un gran acontecimiento en Trafalgar Square con amigos y colegas. Iba a decir a todos sus amigos que vinieran para firmar la petición con el fin de apoyar a Falun Gong. Más tarde, efectivamente volvió dos veces, haciendo que cerca de una veintena de personas firmaran la petición.

Otra señora tomó un folleto de manos de un practicante. Le dijo que hacia un año de la primera vez que se había encontrado a los practicantes y había sabido que los practicantes seguían los principios “Verdad-Benevolencia-Tolerancia” y que son salvajemente perseguidos en China. Quedó triste al saber que la persecución continuaba todavía. Dijo que siendo cristiana creía en la retribución del bien y del mal y en el juicio final. Para ella la inmensa mayoría de las catástrofes que suceden en el mundo son un castigo de Dios contra las malas personas. Añadió que pensaba que Falun Gong, que sigue los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, representa la bondad y qué los que lo persiguen acabarán por recibir su castigo.

Después de mirar la información, las fotos expuestas y aceptado un folleto, un señor irlandés aceptó firmar la petición bajo el estímulo de un practicante. Un poco más tarde volvió para pedir más documentos. Le dijo al practicante que estaba a punto de escribir una tesis sobre los derechos humanos para su Master. Después de leer el folleto comprendió que la persecución de Falun Gong por el régimen comunista chino era un caso grave de violación de los derechos humanos. Hacía falta que tuviera una comprensión global de la persecución. El practicante pues le dio un DVD que clarificaba los hechos verdaderos a propósito de Falun Gong y una copia del Informe sobre las alegaciones sobre la sustracción de Órganos a practicantes de Falun GongUna señora de las afueras de Londres que acababa de asistir a una reunión en Trafalgar Square, aceptó un folleto de manos de una practicante que acababa de saludarla. Echando una ojeada al folleto preguntó: “¿Que es Falun Gong?”. La practicante le presentó detalladamente la práctica, cómo se había propagado a través del mundo así como la verdad sobre la brutal persecución que soportan los practicantes en China. La animó a leer las informaciones expuestas. Mirando los dibujos que mostraban la atrocidad de los métodos de tortura utilizados en los practicantes de Falun Gong incluido la extracción de sus órganos en vida, dijo con emoción: “¡Esto debe ser detenido! ¡Esto debe pararse!”. También le dijo a la practicante que las atrocidades del Partido Comunista Chino contra Falun Gong le recordaban el genocidio perpetrado por los Nazis. Tal gobierno no debería acoger los Juegos Olímpicos. Cuando la Alemania nazi celebró los Juegos olímpicos en 1936, el mundo bajó la guardia a propósito del régimen militar de Hitler, engañado por su rápido crecimiento económico y su índice de empleo elevado. La Segunda Guerra Mundial que siguió fue una dura lección para el mundo. No deberíamos dejar la historia se repitiese.

Un hombre se dirigió derecho hacia el stand para firmar la petición. El practicante que se encontraba en el stand le preguntó si conocía Falun Gong. Respondió que venía de los Estados Unidos. Se había enterado de la verdad a través de los practicantes de Nueva York. No esperaba oír hablar de nuevo de la persecución a los practicantes en Londres. Encontraba lamentable que tal inhumana persecución pudiera existir. Espera sinceramente que la persecución cese inmediatamente.

Un señor y una señora chinos se quedaron un largo momento delante de la exposición y el señor no dejaba de explicarle cosas a la señora. Un practicante se les acercó para hablarles. El señor dijo que acababa de llegar de Hong Kong y conocía perfectamente los hechos de Falun Gong, que es perseguido en China. Piensa que un gran número de estos hechos son censurados por el régimen comunista chino y qué no más de 10 % de lo que se veía aquí sería autorizado a entrar en China, de la misma manera que el grueso de la población china no había podido enterarse de la verdad sobre la matanza de la Plaza Tiananmen, que fue disimulado por las autoridades La señora estuvo de acuerdo y dijo: “Usted tiene razón. Efectivamente jamás vi estos documentos en China.”. La señora tomó un folleto de manos del practicante.

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