La Divine Land Marching Band de Nueva York celebra su tercera conferencia de intercambio de experiencias

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La Divine Land Marching Band de Nueva York celebró su tercera conferencia de intercambio de experiencias con motivo de su cuarto aniversario, el 5 de diciembre de 2009. Más de 130 miembros asistieron a la conferencia y catorce de ellos compartieron sus experiencias en el camino de la cultivación.

Un practicante francés que toca el corno había dejado la banda por otro proyecto durante un año. Sin embargo, él comprendió que es posible seguir practicando su instrumento durante su participación en otro proyecto. Para él, cada proyecto es como un jugador de ajedrez sobre la mesa de juego de la rectificación del Fa, lo cual es importante. "Fueron mis nociones humanas las que me hicieron pensar que un proyecto era mejor que otro. Todo el mundo debe hacer bien lo que hace y tratar de mejorar".

Un trompetista recuerda lo difícil que fue para él aprender a tocar su instrumento. "La primera semana me escondía en el baño para practicar, de manera que los demás no pudieran oírme. Cuando conseguí hacer una nota apropiada, eso me transportó".

La familia de un practicante que toca el trombón se quejaba del ruido que hacía cuando tocaba "Traté de mirar en mí. Tuve que planificar mi tiempo y de ese modo, practicaba mi instrumento cuando los miembros de mi familia no estaban descansando. Si verdaderamente no podía encontrar un momento apropiado, me escondía en el garaje con las ventanas y las puertas cerradas. En verano, el calor no me detuvo".

Otro músico que tocaba el trombón habló de cómo se sentía cuando estaba con los practicantes tocando sus instrumentos. "Todo el mundo quiere transmitir la belleza de Falun Dafa. Es un maravilloso ambiente para aprender los unos de los otros, tener más pensamientos rectos y mejorar nuestro xinxing. Debo apreciar todas las oportunidades que comparto con ellos.

Un músico que tocaba el tambor, dijo que una vez se levantó a las 3am y recorrió 800 kilómetros, sólo para participar en un desfile. Ella tomaba cada presentación muy en serio "Me odiaba a mí misma cada vez que cometía un error. Sólo cultivándome bien y tocando bien, puedo transmitir una energía pura y positiva a la gente". Dijo que en una ocasión tuvo un fuerte apego a los celos que no podía abandonar. De repente, llegó el momento de tocar "Falun Dafa es bueno”. Cuando la canción terminó, ella se dio cuenta que sus celos habían desaparecido. "En un campo tan recto, no hay lugar para las nociones negativas. Maestro me ayudó".

Después de la conferencia, los miembros de La Divine Land Marching Band dieron un concierto. Comenzó con una presentación grupal interpretando la pieza musical "Falun Dafa es bueno", seguido por los solos de varios instrumentos musicales. Al final, los miembros interpretaron la pieza musical titulada: "Gracias, Maestro" para expresar su máximo respeto a su maestro benévolo.

Versión en chino disponible en: http://minghui.ca/mh/articles/2009/12/7/213993.html


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