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En el campo de trabajos forzados para mujeres de Beijing, cuando quieren torturar a practicantes de Falun Gong, las guardias usan el método de patearlas en las costillas con zapatos de suela de cuero. De esta manera los daños en la superficie no se pueden ver, pero los órganos internos sí pueden resultar severamente afectados.
Guo Lina, una guardia del cuarto pabellón en el campo de labores para mujeres de Beijing, usó este método para torturar a practicantes. Cuando en una ocasión una practicante se rehusó a escribir una "declaración de garantía" para abandonar la práctica de Falun Gong, Lina la empujó al suelo y la pateó repetidamente en el costado izquierdo. La practicante tenía tanto dolor que se curvó en forma redonda y no podía respirar. Entonces Guo dejó de patearla y así ella pudo recuperar el aliento y permanecer con vida.
Aparte de las magulladuras en la parte baja de la pierna derecha y las fracturas en la mano izquierda, no había otros signos evidentes de la paliza. Sin embargo, la practicante tuvo un abundante sangrado interno. Empapó tres rollos de papel de baño con toda la sangre que tosió y el bazo le sangró durante más de diez días. Aún tiene señales de fractura de huesos sobresaliendo de la mano izquierda. Este es otro ejemplo de tortura realizada por las guardias en el campo de labores para mujeres de Beijing.
Versión en chino disponible en: http://www.minghui.org/mh/articles/2010/8/14/228329.html
Versión en inglés disponible en: http://www.clearwisdom.net/html/articles/2010/8/27/119654.html
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