Falun Dafa a través del mundo: Gotemburgo, Suecia

Los practicantes chinos y occidentales comparten recuerdos maravillosos de las enseñanzas del Maestro Li
Con el fin de reducir los costos para los participantes en la serie de conferencias en Suecia, el Maestro Li ha enseñado el contenido de la conferencia de nueve días en tan sólo siete días. Durante estos siete días, el Maestro siempre se preocupaba por los estudiantes en cada situación. Para que pudiesen entender, explicó las cosas varias veces. Los estudiantes chinos y occidentales se quedaban con una impresión muy fuerte de la compasión profunda del Maestro.

La Sra. Wang dijo: "Durante la sesión el Maestro Li nos ha enseñado Falun Dafa, él lo explicó con mucha claridad y con paciencia. Con el fin de ayudar a los estudiantes occidentales a entender mejor, a veces el Maestro lo dibujó. Le tomó mucho tiempo para corregir los movimientos de las manos de cada estudiante que aprendió los ejercicios. Una vez corregidos, ya que los movimientos de las personas no eran correctos, el Maestro Li tuvo que corregirlos de nuevo. A veces tuvo que corregir varias veces los movimientos de un solo estudiante".

"Además, el Maestro Li fue siempre puntual, seguía la programación y siempre recordaba a los estudiantes que llegaran a tiempo. Cada día, él llegaba antes de la hora y comenzaba a enseñar a la hora prevista. Vestía siempre apropiadamente y mantenía criterios elevados. Una de las impresiones más conmovedoras que tuve fue cuando lo vi con una caja de fideos instantáneos cuando lo conocí en el aeropuerto. El Maestro Li llevó una vida sencilla y pensaba en los demás en todo momento. Estábamos escasos de personal para este período de sesiones y yo estaba irritable, y respondí impacientemente a las preguntas de algunos estudiantes. Más tarde, cuando comimos juntos, el Maestro Li dijo: "Debes ser amable con estos estudiantes". Sentí que era muy fácil de llevar.

Una de las estudiantes de esta sesión, Pirjo, una enfermera, recordó la alegría de asistir a esa clase. "Uno de mis amigos me recomendó esa clase, así que fui sólo por curiosidad. Mi trabajo era agotador. Yo estaba a menudo enferma. Mi espalda me dolía. Estaba cansada todo el tiempo. Sin embargo, durante la clase, mi cuerpo fue limpiado. Sentí una gran cantidad de energía. Todo fue maravilloso. Tuve muchas, muchas preguntas durante la sesión y el Maestro Li respondió con mucha paciencia y detenimiento". También nos enseñó con paciencia los ejercicios. Si los movimientos de una persona no eran correctos, los corregía.

Bolette todavía no podía evitar sentirse emocionada y agradecida a la memoria de la sesión de los siete días de conferencia. "Todos estos años he buscado a un maestro que pueda guiarme para volver a casa. Yo realmente no sabía a qué casa me refería, o incluso lo que significaba esta casa, pero en el fondo de mi corazón sabía que era importante para mí volver a casa. Pero nunca encontré a un maestro y un día pensé en abandonar mi búsqueda. Pensé que mi maestro podía encontrarme, así que decidí esperar simplemente. En la Pascua de 1995, tal vez había llegado el momento. Un día fui a asistir a una clase de qigong pero el maestro de Qigong no vino. Mientras tanto, una mujer china vino y nos dijo que un Maestro de Qigong iba a venir a Suecia para dar conferencias. Ella nos distribuyó impresos sobre esta clase. No lo leí de inmediato, pero en el fondo de mi corazón, sentí que el Maestro al que he estado esperando todo este tiempo había llegado. Este sentimiento era tan claro. Después de asistir a las conferencias del Maestro Li, pude hablar con esta mujer china y le dije que esperaba a ese maestro desde hace tiempo. Ambas teníamos lágrimas en los ojos. En ese momento, no sabíamos por qué. Aunque nuestra comprensión de toda la conferencia fue limitada, nos dimos cuenta de que era totalmente diferente de lo que habíamos aprendido antes".

Bolette continuó: "Me impresioné mucho cuando empezamos a aprender los ejercicios después de la clase. El Maestro Li corregía nuestros movimientos y yo podía sentir que eran poderosos. Experimenté un sentimiento profundo, que nunca lo había sentido antes. Cada vez que mis movimientos eran correctos, me aportaban una energía muy fuerte. Eso siempre me sorprendió mucho. Un día, mientras estábamos practicando la segunda serie de ejercicios de Falun Dafa, la posición de estaca parada, me quedé de pie en posición de sostener la rueda. El Maestro Li corrigió la posición de mi pulgar izquierdo. Sentí el tacto del Maestro Li, era tan ligero y atento, que casi no era consciente de eso. Esta ligera diferencia de posición fue una sensación increíble. Desde entonces he corregido los movimientos de muchos otros practicantes. También hice lo mejor posible para ser muy respetuoso, muy suave para no molestarlos. Un día durante la clase, mientras que yo practicaba de nuevo la segunda serie de ejercicios, mantuve mis manos frente mi cabeza con gran esfuerzo. Abrí los ojos y vi de pie al Maestro Li delante de nosotros, sonriendo tranquilamente. Yo sabía que nos estaba ayudando con la limpieza de nuestros cuerpos".

Quince años han pasado rápidamente. Recordando las lecciones del Maestro Li en Gotemburgo, los practicantes occidentales todavía presentes estaban felices y agradecidos. Ellos apreciaron el entorno de la práctica y de la cultivación. Como Bolette dijo: "Estoy muy agradecido por ese momento. Cuando más lo necesito, hay siempre practicantes alrededor de mí. Estoy muy agradecido por este entorno de práctica dado por el Maestro. Gracias a este entorno y este lugar, hemos sido capaces de seguir apoyándonos unos a otros y emprendiendo un viaje perfecto. Este entorno es muy importante".

Las semillas de Verdad-Benevolencia-Tolerancia han echado raíces profundas en Suecia.
Aunque el concepto oriental de la práctica de « cultivación » por lo general no es tan conocida en Occidente, muchos practicantes occidentales han ido entendiendo lo que significaban los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia en su vida cotidiana. También han llegado a comprender que el significado interno de la cultivación y la práctica consiste en cultivar su mente y su corazón.

El practicante sueco Pirjo dijo: "Cuando conocí al Maestro Li por primera vez durante la conferencia, sentí que él no era una persona común y corriente. Sentí una especie de sentimiento imposible de describir. Me sentí muy feliz en su presencia. Su energía me hizo feliz. Él nos enseñó muchas cosas buenas, la importancia de ser una buena persona y por qué debemos ser uno. Me hizo sentir muy cálido y apacible. Él mismo emitía los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. No importa cuántas preguntas le hicimos, él siempre fue muy paciente y respondió a todas para nosotros. Aunque había muchas preguntas repetidas, él siempre respondía con paciencia. Más tarde, cuando el Maestro habló de la cultivación y de la práctica, me atrajo mucho el concepto. Aunque no tenía una comprensión profunda de Dafa en ese momento, sin embargo, me di cuenta que era muy valiosa. Yo sabía que había encontrado una gran via de cultivación. Me di cuenta de que todo lo que enseñó el Maestro Li era verdad".

Pirjo agregó: "Asistir a esta serie de conferencias ha cambiado mi vida. Después de estar comprometido en la cultivación, aprendí a atravesar las dificultades que encontraba en mi vida o en mi trabajo. Aprendí a seguir los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia en todo lo que hago. A veces descubro que tengo que eliminar los viejos hábitos, con el fin de no cometer más errores, para seguir los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Es un verdadero reto para cada uno, pero debemos tratar de todos modos. Podemos hacerlo mientras lo decidimos".

Antes de practicar Falun Gong, Sven, un practicante sueco sintió un gran interés por la historia y la cultura asiática. Un amigo le aconsejó que asistiera a una serie de conferencias del Maestro Li. Explicó con entusiasmo: "Esta conferencia me dejó una impresión profunda. Realmente era un gran Maestro. Vi un estilo de Maestro. Él nos enseñó cosas profundas con palabras sencillas. Todo lo que el Maestro me ha enseñado me ha conmovido profundamente. Me sentí muy bien cuando me senté a escuchar. Jamás había sentido tal experiencia antes. Incluso sentado y escuchando me hizo sentir la energía a través de mi cuerpo. Entendí muy firmemente estas profundas enseñanzas. Cuando el Maestro Li habló del Falun, sentía la energía girar en mi cuerpo. En ese momento, yo no entendía lo que era el Falun, pero sentía la energía girar en mi abdomen. Anteriormente había intentado diferentes prácticas de qigong, pero simplemente no había comparación con Falun Gong. Falun Gong hablaba de todo, desde aquí hasta el universo entero. El qigong que yo había practicado antes tenía el único objetivo de curar las enfermedades y sentirme mejor, solo en el nivel de qi. Después de iniciar la cultivación de Falun Gong, poco a poco llegué a entender que la cultivación debía mejorar el interior, hacer un esfuerzo para mejorar mente y corazón y cumplir con los principios de Verdad- Benevolencia-Tolerancia".

Más tarde, cuando Sven intentó aplicar los criterios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia para mejorar en su vida cotidiana y su trabajo, descubrió que, efectivamente no era fácil. Él dijo: "En mi lugar de trabajo, a veces, mis colegas y yo no nos llevábamos bien. En tales situaciones, era en efecto difícil ser tolerante. A veces yo podía hacerlo y estaba feliz. Cuando no había actuado de conformidad con los principios de Dafa, traté de mirar dentro de mí mismo y prepararme para hacerlo bien la próxima vez.

Cada situación es como un espejo que refleja claramente el espíritu, lo que le permite ver si realmente uno puede comprender verdaderamente. En cuanto a la manera de cultivar, estoy cada vez más consciente. Al principio no teníamos mucho material para leer, pero entendí que el principio esencial era la Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Lo más importante es comprender este punto".

Los suecos han apreciado la oportunidad de aprender Dafa con el Maestro Li Hongzhi. Después de las clases, los practicantes han seguido durante años, organizando sesiones de nueve días con los videos de las conferencias del Maestro Li, para presentarles Dafa a más personas. Todos los domingos practicaban los ejercicios de Falun Gong en el sitio de práctica. Más y más gente se unió a ellos. Rápidamente, se hizo cada vez más importante para los estudiantes de poder leer Zhuan Falun en sueco. Para superar esto, muchos practicantes en Suecia han emprendido la tarea de traducirlo. Durante el proceso de traducción, fueron muy serios y meticulosos. Después de sucesivas revisiones, la versión sueca de «Zhuan Falun» se publicó en octubre de 1997. Las semillas de Verdad-Benevolencia-Tolerancia han echado raíces profundas en Suecia.