La prisión para mujeres de Shanxi está denunciada por añadir drogas desconocidas a la comida de las practicantes de Falun Gong que se han negado a renunciar a su creencia en la práctica. Según se informa, las Sras. Li Runfang, y Kang Suqin han sufrido síntomas por dichas drogas.
Esta prisión está ubicada en Maoerling, distrito de Yuci, ciudad de Jinzhong, provincia de Shanxi. Los guardias presuntamente añaden drogas a las gachas de arroz cuando las practicantes de Falun Gong están detenidas en habitaciones de aislamiento. Ahí se encuentran más débiles al estar largos periodos de pie, siendo éste un método utilizado como tortura. Algunos guardias de prisión inyectan drogas en los panecillos al vapor o en la alimentación forzada con pastillas machacadas.
Hay diez zonas en la prisión para mujeres de Shanxi. Cada zona tiene una habitación de aislamiento donde las practicantes de Falun Gong son torturadas. Las cortinas están corridas día y noche dentro de las habitaciones cerradas. Las practicantes están dentro de las habitaciones, cada una vigilada por cuatro personas día y noche. No les dejan dormir en 24 h y les hacen estar de pie, separadas de la pared, así que no tienen donde apoyarse. Cuando las practicantes no pueden estar más en esa posición, son golpeadas. No les permiten ducharse, lavarse ni usar el baño, tampoco lavarse las manos antes de comer. Cada vez que cierran los ojos, les echan agua fría en la cara. A algunas practicantes les empapan en mitad del invierno. La mayoría de la gente asignada a vigilar a las practicantes son homicidas, toxicómanas, y otros delitos graves. Torturan con gusto a las practicantes de Falun Gong a cambio de un poco de beneficio. Estas reclusas han estado insultando y golpeando a las practicantes de Falun Gong en un intento de hacer que renunciaran a Falun Gong. Las reclusas ponen programas de propaganda odiosa día y noche, a veces ponen el volumen muy alto.
Según un informe publicado en Minghui del 3 de abril de 2012, Li Runfang, practicante de Falun Gong de la ciudad de Taiyuan, provincia de Shanxi, ha sido condenada a seis años en la prisión por practicar Falun Gong y difundir la verdad sobre la práctica. La prisión para mujeres de Shanxi no ha dejado que su padre la visitara durante nueve meses, porque él, también practica Falun Gong. Su padre solo pedía poder ver a su hija a través del cristal sin hablar por teléfono, pero también se lo negaron.
La Sra. Kang Suqin, practicante de Falun Gong local, de unos 60 años, ha sido encarcelada repetidas veces por practicar Falun Gong. Fue arrestada por el agente Wan Bolin en octubre de 2002, y encarcelada en el centro de detención de la ciudad de Yaiyuan. También fue forzada a llevar esposas y grilletes en los pies.
Versión en chino disponible en: http://www.minghui.org/mh/articles/2012/5/29/山西女监在法轮功学员饭里下药-258200.html
Versión en inglés disponible en: http://en.minghui.org/html/articles/2012/6/29/134176.html
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