Testimonio compartido en la Conferencia Internacional de Falun Dafa 2003 en Berlín

Soy oriundo de La Reunión y descubrí la práctica de Falun Gong en París hace un año.

Desde pequeñito sabía que había algo en mí que pedía ser cultivado. Siempre he estado en busca de una vía iniciática. Durante varios años he leído todos los libros de espiritualidad que tenía a mano, sin que eso me permitiera elevarme verdaderamente. Entonces encontré a una persona que había alcanzado un determinado grado de realización. Me enseñó una serie de principios que intenté aplicar lo mejor que pude. Sabía que mi vida iba a consagrarse enteramente a la espiritualidad y que en el momento oportuno encontraría una vía verdadera, varias personas dotadas de capacidades me lo confirmaron. Dejé mi isla en el 2000, sabía en ese momento que iba a encontrar a un maestro auténtico pero ignoraba completamente el momento y el lugar.

Seguí con mis estudios de psicología y durante este tiempo, mi corazón esperaba el momento mágico en el que el encuentro iba a producirse, pero no pasó nada durante un año y medio. Fue en un bonito día de verano, hacía ya más de un año que no habíamos hablado, cuando recibí una llamada de esta persona a la que había encontrado en La Reunión. Me dijo que había estudiado un método tradicional chino llamado Falun Gong basado en tres grandes principios: "Verdad, Benevolencia, Tolerancia" y añadió que pensaba que esta práctica podría colmar lo que estaba esperando. Me entusiasmé, finalmente una puerta se abría… Empecé a informarme y decidí comenzar la práctica. Fue en el Parque de Buttes Chaumont que aprendí los movimientos. Tengo que decir que al principio fui muy prudente ya que tenía algunos conceptos muy arraigados y me resultó difícil cuestionarlos al principio.

Así, la primera lectura de Zhuan Falun fue una prueba, aun estando de acuerdo con lo esencial del libro, me preguntaba sobre una serie de puntos. Como decía en esta época, no tenía los elementos para poder asimilarlos. Es verdad también que los criterios exigidos para un practicante eran elevados y que no sabía por donde empezar, era tanto trabajo que me parecía inmenso. En esta época, tenía una vida, a pesar de todo, con malos hábitos. Ahora desde la distancia, diría que estaba perdido en la sociedad de la gente común, mis costumbres eran por lo menos detestables. Hasta que encontré Falun Gong, no podía quitármelas, a veces reaccionaba por impulsos, me dejaba llevar por el deseo que no llegaba a reprimir. Entonces tomé varias resoluciones, trate de imponerme una serie de restricciones para cambiar mi comportamiento.

Pero fue un fracaso completo. Cuando volví de vacaciones a mi isla de origen, me encontré con todos los demonios interiores que había intentado eliminar… entonces tuve que admitir las cosas como eran, no estaba listo, no había quitado las raíces del deseo en el fondo de mi corazón, hacía apenas dos meses que había empezado a practicar. Intentaba resistir a las tentaciones con todas mis fuerzas, pero tenía la impresión que mi resistencia no hacía más que reforzar mis deseos, finalmente, agotado, acabé por fallar, renuncié y caí de nuevo en mis malos hábitos. Me acordé que el Maestro había dicho que el Xiulian era un proceso gradual, así que a pesar de todo, seguía con la práctica y la lectura. Me di cuenta simplemente que no me divertía tanto como antes y comenzaba a sentirme desfasado con mis amigos de entonces.

A mi vuelta, decidí sacar lecciones de mi última experiencia y hacer hincapié aún más en la cultivación. Leí Zhuan Falun dos veces sin interrupción en poco tiempo. Los efectos fueron fabulosos, me di cuenta que numerosos apegos se habían fundido como nieve en el sol, en dos semanas ya no era el mismo hombre, mi corazón había comenzado a cambiar en el fondo, los efectos de la práctica se acentuaron también, comenzaba a tener sensaciones cada vez más intensas. Un acontecimiento marcó profundamente mi cultivación. En marzo de 2003 asistí a la conferencia de intercambio de experiencias de Ginebra. Este día cambió completamente mi existencia, entonces me di cuenta de la profundidad de Dafa, una parte de mi ser se despertó a una verdad que tenía aún dificil de comprender en su conjunto. Tuve entonces la impresión de hacer un salto inmenso adelante, mi corazón sufrió un verdadero cambio este día, el campo de energía que se desprendía de esta gran reunión me había afectado y las experiencias de los practicantes que manifestaban su gran compasión me conmovieron. Al volver a casa, sabía que una parte de mí acababa de morir y que otra surgía de las profundidades de mi alma para ganar la claridad del día.

A partir de este momento, me he considerado verdaderamente como un practicante, en una semana leí casi todas las conferencias del Maestro desde 1998. Y lo más extraño es que no me sorprendió lo que leí, ya había tomado conciencia de la inmensidad de la Ley en la reunión de Ginebra; me di cuenta de la importancia del proceso de rectificación, algo en mi me empujaba adelante, me di cuenta de que era el objetivo de mi vida. Tomé conciencia que además de transmitirnos una vía justa ordinaria, el Maestro nos ofrecía la Gran Vía, la Gran Ley del Universo y que todos estábamos viviendo un momento histórico único y sin precedentes. Entonces, mi corazón sólo aspiraba a una cosa: ser digno del título de discípulo de Dafa del período de la rectificación de la Ley. Todo en mí me empujaba hacia ello.

A partir de este momento, he sentido profundas modificaciones en mi manera de pensar y actuar; los deseos y tentaciones de toda clase que me invadían se hicieron cada vez más escasas y terminaron por desaparecer en gran parte. De golpe, gracias a la potencia de la Ley, tuve la impresión de ser limpiado en el interior. No tenía ya que resistir y luchar contra mis demonios personales, me parecía que ellos habían sido fulminados por la potencia de Dafa y del Maestro. Cada vez más me comprometí en las distintas actividades organizadas. A veces tenía dudas, pero cuando esto ocurría, me centraba siempre sobre los tres grandes principios "Zhen, Verdad - Shan, Compasión - Ren, Paciencia" y cada vez mis incertidumbres desaparecían ante la evidencia de la veracidad de Dafa, una voz interior me decía de continuar, de avanzar a pesar de todo, de no quedarme paralizado por mis miedos y la falta de confianza en mi mismo.

Por ello en el espacio de algunos meses, gracias a Dafa, he visto mi universo interior completamente transformado y armonizado por la Ley, realicé cosas que no pensaba poder hacer antes de numerosos años. Por todo esto y por muchas otras cosas, gracias Maestro.

Tomé también conciencia de la importancia de esclarecer la Verdad. Pensaba a menudo en los discípulos en China continental que bajo la presión extrema de la perversidad seguían, a pesar de todo, esclareciendo la Verdad a la gente. A menudo, me preguntaba cómo hubiera reaccionado en tal situación, y la respuesta a la que llegaba no iba inevitablemente en el buen sentido, y de nuevo las dudas aprovechaban este fallo para precipitarse en mi espíritu. Me decía entonces que no era digno del título de discípulo de la rectificación. Después de haber intercambiado con practicantes a este respecto, llegué a una nueva comprensión. Había entendido que no debía tomar la persecución como criterio para evaluar mi Xiulian y que razonar así equivalía a validar los acuerdos de las viejas fuerzas y reconocer la persecución, estaba adoptando su propio razonamiento. Estaba seguro que debía elevar mi Xinxing y quitar mis apegos, sin embargo, para eso debía basarme en la asimilación de las características supremas del universo "Zhen, Shan, Ren”, y sobre los arreglos del Maestro para conmigo, no tenía absolutamente que hacer referencia a tal prueba para sublimarme. Sin embargo, reconocía que me quedaban muchos apegos por quitar y ponía toda mi voluntad para extirparlos.

Después de haber tenido esta comprensión, tuve un sueño que voy a contarles: Me veía en Francia con otros practicantes preparando un Hongfa en China, luego, de repente, como si China se encontrara en otras dimensiones, que a la distancia de un pensamiento, yo me encontré allí, sentía una determinada febrilidad en mi pero rápidamente se borró para dejar lugar a la firme voluntad de revelar la perversidad, así conseguí infiltrarme en una gran administración china, saque una bandera y me puse a gritar con todas mis fuerzas "Falun Dafa Hao". Los policías me detuvieron pero finalmente me dejaron libre y volví de nuevo a Francia para preparar otras acciones en China.

Después de este sueño, comprendí que nuestras acciones aquí, fuera de la China continental, tenían un impacto que superaba de lejos nuestra imaginación y que tenían el poder de asustar en gran parte a la perversidad, quizas China no está tan lejos como creemos. Mientras que esclarecemos la Verdad aquí, en otras dimensiones, nuestros numerosos nosotros hacen lo mismo. Ellos no conocen las mismas restricciones que nosotros, como dice el Maestro, no subestimemos el alcance de nuestro esclarecimiento. Cualquiera que sea el lugar en donde estemos, lo más importante es nuestro corazón, entonces continuemos cada uno validando la Ley para que el mundo entero sepa que Falun Dafa es bueno.

Después de haber tenido esta comprensión, decidí dedicarme plenamente a la propagación de la Ley. Así pues, quise dar a conocer Dafa en mi isla natal, La Reunión. Con la ayuda de algunos practicantes organicé este viaje. Bastante conmovido de ver la compasión de los practicantes que me ayudaron en todos los planes, tuve realmente la impresión que formábamos un sólo y mismo cuerpo, no había más de tales conceptos como "lo mío" o lo "tuyo", éramos elementos de un mismo conjunto animados por la voluntad de dar la salvación a otros, y nos servíamos de los recursos que estaban a nuestra disposición en el marco de la Ley. Fue así que llegué allí, bajo y con la energía benévola del cuerpo entero de practicantes.

Pero no sabía por dónde comenzar y si iba a estar a la altura de la tarea que el Maestro me había confiado, tengo que decirles que soy una persona más bien de carácter introvertido y debía superar este apego, el Maestro ha dicho que para los alumnos que llegaron recientemente el Xiulian se combinaba con esclarecer la verdad y la validación de la Ley. Así pues, llegué a La Reunión con las maletas llenas de documentos de aclaración y carteles. Comencé por explicar a mis padres el objetivo esencial de mi visita hablándoles de la práctica y de la persecución, ellos inmediatamente lo apoyaron, no tuve que convencerlos de nada. En efecto pienso sobre todo en mi padre, desde siempre, ha demostrado una gran paciencia y un gran desapego tanto en su trabajo (él es agricultor) como en la vida diaria. Mucha gente lo trató de idiota porque no defendía sus intereses personales. Desde que le hablé del método y los principios se fascinó. Sentí que fue profundamente afectado por la Ley, esto ilustra lo que el Maestro dice cuando habla del De que se armoniza directamente con las características del universo. Inmediatamente quiso practicar y profundizar en los principios, pienso que comprendió la profundidad de Dafa ya que desde entonces continúa cultivando y practicando solo.

Muy rápidamente, me di cuenta que mucha gente entre mis amigos y mi familia tenía una gran afinidad predestinada. En cuanto les hablé de Dafa, inmediatamente quisieron practicar, todos estaban indignados por la persecución y muchos firmaron la petición. Me acuerdo de un día que se reunió toda la familia para practicar, había unas veinte personas, tíos, tías, primos, de 7 a 77 años si cuento a los abuelos y a las personas mayores que observaban. Este día practicamos allí las 5 series durante más de una hora. Enseguida, renovamos esta clase de reagrupación pero a más pequeña escala.

Al mismo tiempo, me puse en contacto con un practicante que vivía allí, ambos organizamos una serie de actividades por toda la isla. El 20 de julio, hicimos una presentación del método y la persecución en una playa muy frecuentada. Varios periodistas vinieron al acontecimiento.

Ese día, los habitantes de La Reunión se enteraron de la terrible persecución en China, cinco artículos más bien positivos salieron en los dos diarios más importantes de la isla. Informaron a los habitantes de La Reunión que desde hace cuatro años el régimen de Jiang persigue a pacíficos practicantes de un método tradicional de Qi Gong. Estos artículos tuvieron tanto más impacto ya que La Reunión se preparaba para convertirse en el centro avanzado de las relaciones entre Francia y China. En efecto, está previsto establecer un consulado chino en la isla, y La Reunión estaba tejiendo vínculos económicos y culturales con la ciudad de Tianjin. Por otra parte, cerca de 30.000 personas de origen chino viven aquí. Gracias al sitio ClearHarmony pudimos contabilizar todos los testimonios de tortura que habían tenido lugar en los dos campos de rehabilitación de esta ciudad. Y en esa ocasión, aprovechamos también para informar a los 24 alcaldes de la isla así como a los 5 diputados respecto a la persecución enviándoles documentos extraídos del sitio web.

El Maestro nos ofrece muchas ocasiones para esclarecer. Así conseguimos contactar con la radio más importante de la isla y que lleva el nombre predestinado de "Freedom", cientos de miles de personas la escuchan cada día. Generalmente es muy difícil llamar a la línea directa, a veces es necesario intentarlo durante varias horas. Habíamos decidido que mientras que uno hablara, el otro enviaría pensamientos rectos. Pues bien, este día pudimos comunicar al primer intento sin tener que esperar, todo se hizo muy naturalmente, y las noticias de Dafa se extendieron por las ondas, desde los particulares hasta los grandes almacenes, pasando por las numerosas empresas privadas que a menudo se conectan en esta misma frecuencia. También organizamos varios Hongfa por toda la isla, y mucha gente participó. En el espacio de tres semanas una treintena de personas practicaron regularmente y establecimos varios lugares de práctica que permitirían a otras practicar no solamente por una vez. Varias personas nos dijeron "gracias por haber aportado algo tan maravilloso". Me acuerdo de estos amigos que me dijeron "es como si toda nuestra vida hubiéramos esperado esto".

Realmente tomé conciencia de que tenemos una relación predestinada con toda la gente que conocemos como discípulos de Dafa. El Maestro arregló bien las cosas. Por otra parte, durante esta estancia, realmente sentí la presencia de nuestro muy venerable Maestro, es la potencia de Dafa la que nos guió y sostuvo. Me acuerdo de una señora que antes de conocer la práctica soñó con un Maestro chino que le mostraba los movimientos. Y que algunos días más tarde al ir a donde una amiga a la que habíamos dado a conocer el método, reconoció la cara del Maestro Li sobre la cubierta de Zhuan Falun y dijo "es el que vi en mi sueño". A menudo he tenido la impresión que todo ya estaba previsto, y que no hacíamos más que seguir el camino que se abría ante nosotros, si nuestra intención es pura entonces la potencia ilimitada de Dafa puede expresarse a través de nosotros.

Desde mi vuelta, hace ahora dos meses, mi estado de ánimo evolucionó en gran manera, quedé sorprendido por la diferencia entre mis dos viajes a la isla en el espacio de seis meses. La primera vez, fui como un practicante inicial que acababa de descubrir a Dafa, yo aún estaba obstruido por los hábitos de vida egoístas que no llegaba aún a superar. La segunda vez, había comprendido el tamaño de Dafa, y quería servir a la Ley lo mejor que pudiera a pesar de mis limitaciones y mis apegos de todo tipo. Intenté lo mejor que pude de hacer pasar la Ley delante de mi, antes de mi ego, y los resultados fueron asombrosos.

Quería simplemente por esta experiencia, aportarles un poco de lo que me ofrecieron, aquí son solo mis comprensiones limitadas y mi vivencia, pero espero que mi objetivo se lograra. Comprendí a través de todas estas experiencias que si la raíz de nuestras acciones está en la Ley, los frutos que generan son necesariamente armoniosos. Gracias a estas experiencias, comprendí que nada es imposible, por eso, por muy grande que sea nuestro apego, por muy difícil que pueda ser nuestro Xiulian, si ponemos toda nuestra voluntad en querer elevarnos y mejorarnos hasta fundirnos en la Ley, entonces el Maestro se ocupará seguramente de nosotros, es completamente nuestro corazón el que cuenta, "Xiu depende de uno, el Gong depende del Maestro". Terminaría por esta frase del Maestro extraída de Zhuan Falun noveno capítulo, que a menudo me ha ayudado en los momentos difíciles: “Lo que es difícil de soportar, uno es capaz de soportarlo, y lo que es difícil de hacer, uno es capaz de hacerlo. Si pueden hacerlo, verán aparecer en una situación desesperada un futuro radiante.”

Gracias a todos, gracias Maestro desde el fondo de mi corazón.