Un gran momento

El 20 de julio de 1999, el régimen de Jiang empezó una campaña a escala nacional para calumniar y perseguir a Falun Gong. En octubre de 1999, fui a la ciudad de Qinhuangdao desde Pekín junto con varios practicantes. Planeamos intercambiar experiencias con los compañeros practicantes de allí y estimular a más gente a dar el paso adelante para validar Dafa.

Todos los practicantes aparecieron a la hora y lugar designado. Empezamos por intercambiar experiencias juntos. Todos compartieron sus propias experiencias de esclarecer los hechos y tuvimos una buena discusión basada en el Fa (1). El campo de energía era sagrado y pacífico, porque todos los compañeros practicantes se veían a si mismos como discípulos de Dafa, nuestras mentes estaban completamente ocupadas en cómo validar el Fa.

Después de compartir las experiencias, supe que muchos practicantes de Qinhuangdao habían hecho muchas cosas para esclarecer la verdad. Su fuerte determinación y fe en Dafa me conmovió profundamente. Habían sufrido toda clase de persecución. Algunos de ellos fueron arrestados en su camino a Pekín para validar Falun Dafa, y fueron golpeados y detenidos; otros fueron puestos bajo alta vigilancia y también fueron amenazados con ser despedidos de sus trabajos. Sin embargo, enfrentando toda clase de persecución, su determinación en Dafa no fue alterada.

Una hora y media más tarde, un compañero practicante que llegaba en ese momento me dijo que había muchos policías secretos fuera del restaurante donde nos encontrábamos. También había algunas camionetas estacionadas por allí. Parecía que todo estaba listo para arrestarnos.

Nunca olvidaré ese momento. Cuando escuchamos la noticia, nadie tuvo el más mínimo miedo. Parecía que la mente de todos estaba llena con el mismo pensamiento: todos somos discípulos de nuestro Maestro. Sólo nuestro Maestro puede hacer la decisión final. La expresión y el tono de voz de todos era pacífica, racional y tan determinada como nunca. Nuestras mentes estaban enfocadas en cómo andar nuestro camino en el futuro y cómo salvaguardar mejor Dafa. Era un reino de mejoramiento colectivo. Aún si alguien fuera a soltar una montaña sobre nuestras cabezas, no podría haber ningún disturbio.

Sentí que nuestros corazones estaban conectados como uno. Estábamos rodeados y apoderados por Dafa. Me di cuenta realmente de cuan afortunado era de ser una partícula de Dafa. No nos diferenciábamos uno de otro. Todos estaban pensando sobre Dafa. En esos momentos, de repente vi auras de siete colores encima de nuestras cabezas. Era sagrado, hermoso e iluminado.

Me sentía profundamente conmovido por lo que vi. Justo después, realmente me di cuenta cuán magnífica y gloriosa puede ser la vida bajo el poder de Dafa.

Después de que nuestro intercambio de experiencias terminó, salimos fuera del restaurante. Los policías secretos nos miraron como nos íbamos. Parecía que todo había dejado de moverse. Nuestro campo de energía había tomado el control de todo. Nos fuimos salvos bajo la mirada de la policía. No nos olvidamos de dejar a la policía con el efecto de nuestra compasión.

Incluso ahora cuando recuerdo ese momento, todavía me siento conmovido con lágrimas por el gran poder de Dafa y los discípulos de Dafa.

Han pasado ya cinco años desde que la persecución empezó en 1999. Los practicantes de Dafa han experimentado una salvaje persecución e indescriptible privación. Sus historias heroicas, la mayoría de ellas sin contar, serán recordadas para siempre por la historia.

(1) Fa; ley y principios; las enseñanzas de Falun Dafa.
Versión en inglés disponible en :
www.clearharmony.net/articles/200406/20353.html