“Es decir, una gran porción de los Dafa dizi vinieron con esos cuerpos cósmicos y cada uno formó relaciones predestinadas (yuan fen) Una vez que alcancen la Consumación y hayan regresado, les será imposible volver a verse de nuevo, aunque lo deseen. Por lo tanto, ustedes deberían atesorar esta parte de su relación predestinada. Y lo que es más, estos vínculos kármicos de ustedes han sido entrelazados entre sí, y distintas relaciones predestinadas se formaron en cada vida. No ha sido fácil. Así que, cooperen cuando estén haciendo las cosas. Las cosas de cada Dafa dizi son también de todos los demás. No formen grandes barreras entre cada cual por algunas pequeñeces triviales. Esto no sirve. Atesoren todo esto. Y además, tienen que cooperar con las cosas de Dafa, y deben hacer un buen trabajo al cooperar.” (Conferencia del Fa en el Área Metropolitana de Nueva York 2003)
Debemos tratar a los compañeros practicantes con pensamientos rectos; cada uno de ellos es un ser muy valioso ¡Es tan difícil obtener el Fa! Por eso, debemos prestar atención a sus problemas, ver donde se han quedado estancados y buscar la forma más bondadosa posible para marcar su apego e intentar que entienda, como dijo Shifu, hacer que entienda las cosas desde el Fa para que pueda elevarse. Recuerdo cuando Shifu dijo algo parecido a “no traten a los seres concientes con pensamientos humanos comunes” y “no los decepcionen”. Estas palabras vienen a mi cuando mi mente está juzgando a un practicante, cuando mi mentalidad competitiva de una manera sutil apunta sus defectos como para derribarlo y no para ayudarlo, cuando paso tiempos prolongados pensando en mis propias tribulaciones, en vez de aprovechar cada oportunidad en que estoy con practicantes para compartir y aprender de ellos.
Mi entendimiento es que cada pequeño grupo de practicantes representa una parte de Dafa. Las relaciones predestinadas son muy valiosas y cada uno de nosotros debe atesorar estas relaciones. En cierta región, área, o ciudad, el cómo coordine un grupo de practicantes, se verá reflejado en la sociedad común de esa región o área en particular. Leyendo Enseñando el Fa en la Conferencia de Atlanta 2003, Shifu enseñó que si el trabajo de clarificación de la verdad es bien hecho, los cultivadores del futuro vendrán. Es muy triste cuando los practicantes están distanciados y por ello se pierden la oportunidad de validar el Fa y hacer las cosas juntos. Claro, tomar la iniciativa de hacer las cosas por uno mismo, es lo que cada uno debe hacer; pero en cuanto a la coordinación entre practicantes, digo que cuando Dafa es puesto en primer lugar, esto es poderosa virtud.
Cuando algún practicante ha cometido un error, o si su pensamiento es diferente del nuestro, o creemos que su entendimiento del Fa es bajo, no debemos apartar a ese practicante, sino, al contrario, más cerca de él tenemos que estar. Sólo de esta forma estamos haciendo completamente lo que Shifu nos enseña. Si lo apartamos y no le damos lugar, ¿es eso compasivo? Si cada vez que muestra un entendimiento inadecuado del Fa, lo dejamos atrás, en lugar de buscar la solución al problema ¿No estamos agrandando nuestro apego, en vez de dejarlo? ¿Acaso no es una vida valiosa cada practicante de Dafa? ¿No vinimos todos a validar el Fa? Sí, sólo que algunos lo han hecho un poco mejor que otros y su entendimiento llega a este punto, y ha puesto Dafa primero. Pero, él todavía es diferente, es valioso, todos y cada uno, además, desde otra perspectiva, ¿cuántos practicantes hay en el mundo? ¿No es pequeño el número? ¿No es por eso que es difícil y mucho el trabajo que hay que hacer para la Rectificación?
A veces, estos conflictos llegan a separar a un practicante del resto o hacer que se desarrolle una separación por la cual hay muchas discusiones. Esto es en sí, algo terrible. Nunca debemos dejar que tal hecho llegue a ese extremo por no poder abandonar nuestro ego.
A veces veo lo siguiente: cuando alguien exhibe un apego, en ese momento, en ese preciso momento, él está siendo irracional, y lo más probable es que no se dé cuenta de ello. Él cree que es correcto, porque es un apego, y así funcionan los apegos, pues hasta que no los hayamos visto por nuestra cuenta, lo consideramos bueno y correcto. Pero todos vinimos a despertar, si nos enojamos cada vez que esto pasa, nos dormimos más y causamos pérdidas. Pues, Dafa es un cuerpo, los discípulos son un cuerpo, si un discípulo se pierde en una tribulación, Dafa pierde, perdemos todos. Somos todos un cuerpo, sería como dañarnos a nosotros mismos. Por eso, sugiero que pongamos más atención cuando coordinamos actividades de Dafa, cuando nos reunimos a estudiar el Fa y demás cosas con otros practicantes.
Aunque es un tema amplio, y existen muchas situaciones distintas, básicamente quiero decir que esto me parece muy importante; recuerdo el artículo de un practicante “Haciendo bien la tres cosas en México” donde decía (no es exacto) ‘mi casa estaba llena de practicantes todos los días’. Definitivamente esto es muy bueno, ya que no se trata de qing, ni de ninguna cosa de la gente común, el ambiente que se forma entre los discípulos de Dafa, siempre es muy puro y uno diferente al de la vida cotidiana de la gente común.
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