Hong Kong: El Tribunal de Apelación rechazó la condena por obstrucción

El 10 de noviembre de 2004 a las 10 de la mañana, el Tribunal de Apelación de Hong Kong rechazó ciertas acusaciones sobre 16 practicantes y retuvo otras 5 acusaciones contra 9 practicantes. El abogado de los practicantes declaró que las detenciones no habían sido justificadas ya que la acusación de "obstrucción" ha sido rechazada. El tribunal protestó a la Oficina China de Enlace Exterior en marzo de 2002. Sin embargo no se debería encontrar a los practicantes culpables por haber ofrecido una ligera resistencia durante su detención ilegal por la policía. Los practicantes de Falun Gong dijeron que continuarían sus esfuerzos para esclarecer la verdad hasta que el Tribunal de Hong Hong retire todos los cargos.

El miércoles se rechazó la condena por obstrucción, un juez dijo que a pesar de la demostración todavía quedaba un gran espacio sobre la acera para que los peatones y los empleados pudieran acceder al edificio. Por otra parte la concentración pareció totalmente pacífica. El Tribunal Civil juzgó mal la protesta a la que se refería la Oficina China de Enlace y concedió poca consideración a la libertad de reunión y de expresión. También el Tribunal de Apelación rechazó la condena por obstrucción de los 16 practicantes.

A la vista de la decisión del Tribunal, Yuk-kai, Secretario en jefe del Monitor de Derechos Humanos en Hong Hong dijo que la decisión era muy significativa porque reafirma el derecho de la población de Hong Kong a protestar en público bajo el sistema constitucional actual. También agradeció a los practicantes de Falun Gong su noble esfuerzo.

Aproximadamente cincuenta practicantes se reunieron en Charter Park y marcharon hasta el Tribunal Supremo de Hong Kong para apelar.

La detención ilegal se efectuó en marzo de 2002 cuando Jiang estaba muy furioso por la difusión de un vídeo de practicantes de Falun Gong en la TV de Changchun. Jiang dio la orden a los policías de matar a los practicantes sin piedad. Por la mañana del 14 marzo de 2002, para protestar contra la orden de Jiang «Tirad a matar» y «Matad sin piedad», cuatro practicantes suizos comenzaron una huelga de hambre de 3 días frente a la Oficina China de Enlace. Doce practicantes locales de Hong Kong hicieron un llamamiento pacífico. Bajo la presión de la Oficina China de Enlace, a las 13 h, las autoridades de Hong Kong desplegaron a un gran número de policías para mover por la fuerza y detener a los 16 practicantes. Por lo menos un practicante suizo y ocho practicantes de Hong Kong resultaron heridos. Los practicantes han sido acusados falsamente de «obstrucción pública» y de «agresión a la persona de la policía». En agosto de 2002 un tribunal de distrito declaró a los 16 practicantes culpables de todas las acusaciones y multó a cada uno entre 1.300 y 3.800 $HK. Entonces los practicantes apelaron. El Tribunal Supremo les atendió durante tres días en septiembre de 2003. Después de un retraso imprevisto de 14 meses, el Tribunal finalmente pronunció su veredicto el miércoles.

Según un informe de Radio Free Asia, el 10 de noviembre de 2004, el Tribunal de Apelación declaró que la Ley fundamental especificaba que los ciudadanos tenían el derecho a reunirse y a protestar. Pero el tribunal civil no prestó atención a esto. Sin embargo el Tribunal de Apelación retuvo la acusación de «obstrucción y agresión sobre la persona de un policía» contra 9 practicantes de 16. Según el informe, los demandantes dijeron que continuarían acudiendo. Albert Ho Chun-yan, un abogado de los demandantes y miembro del Consejo Legislativo de Hong Kong dijo que las acusaciones no habían sido justificadas porque el Tribunal rechazó la acusación por obstrucción. La resistencia moderada de los practicantes era natural y justificable.

Varios medios incluido AP, Australian Broadcasting Corporation (ABC), San Francisco Examiner y otros hicieron un informe sobre este asunto. Una puesta al día de ABC sobre dicho asunto es que Falun Gong alega que por lo menos 1.600 practicantes han sido torturados a muerte desde que China comenzó la persecución hace cinco años.