En marzo del 2001, mi salud se deterioraba y caí en coma varias veces. Los doctores quisieron analizar mi sangre, pero eran incapaces de lograrlo ya que ni siquiera podían extraer sangre de mis venas. Perdí el control de mis intestinos y vejiga. Intentaron resucitarme durante tres días pero mi cuerpo no parecía responder al tratamiento. Finalmente, los doctores le dijeron a mi familia que ellos deberían prepararse para mi muerte. Entonces, mis hijos me llevaron a casa.
Mientras yo estaba semiconsciente, mis hijos pusieron un conjunto de cintas de audio para que yo las escuchara; me dijeron que era bueno para mi. Sin expectativas, mientras más las escuchaba, más las quería escuchar. Los principios mencionados en la cinta eran realmente buenos. Mis hijos me dijeron que se llamaba la Ley Buda. No tenía educación, y no había oído algo de tan alto nivel y tan bueno. Desde el fondo de mi corazón respeté la Ley Buda. Antes de terminar de escuchar las cintas, los milagros ya habían comenzado a sucederme. Comencé a tener diarrea y a vomitar cosas malas de mi estómago. Esto duró tres días. En el cuarto día mi salud comenzó a mejorar. Recuperé más y más mi fortaleza y empecé a comer; después, también comencé a caminar. Desde entonces, desde hace ya dos años, no he tomado ninguna pastilla, ni he necesitado inyecciones. Mi salud está totalmente recuperada. Puedo cuidarme a mi mismo ahora, y no tengo problema en caminar varias millas. La gente del pueblo estaba perpleja acerca de qué tipo de medicina yo había tomado y cómo yo me había recuperado.
Los milagros que Falun Dafa ha manifestado en mi cuerpo y las condiciones que he experimentado son en realidad las mismas mencionadas en el libro. En los dos años pasados, no sólo he recuperado mi salud, sino mi naturaleza mental (carácter moral) también ha mejorado. Antes tenía mal genio, pero ahora puedo tolerar a otros. Ahora, al hacer cosas pienso primero en los demás.
Dafa ha salvado mi vida. Creo firmemente en Dafa. Nadie puede cambiar mi creencia en Dafa. Obtuve el Fa en un momento crítico de vida y muerte. Soy realmente muy afortunado. Quiero aconsejar a quienes no hayan aún escuchado a Dafa y quienes aún tienen buenos pensamientos, por favor tómense el tiempo y lean el inestimable libro Zhuan Falun.
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