El pasado día 4 de marzo de 2005, el periódico británico Belfast Telegraph ha publicado un artículo titulado “Un espectáculo para llamar la atención de la tortura en China”. María Foy informaba que los practicantes de Falun Gong han celebrado estas exposiciones en otras quince ciudades del Reino Unido para denunciar la brutal tortura que el régimen chino les inflige porque se niegan a renunciar a su creencia.
El reportaje decía también que una exposición al aire libre se efectuaría en el mercado de Granos de Belfast durante dos días para llamar la atención de la tortura y la persecución que se está efectuando en China. Según el artículo, esta exposición titulada: “La persecución frente a los principios”, está organizada por practicantes de Falun Gong. Falun Gong es una cultivación espiritual tradicional que combina movimientos suaves con ejercicios tranquilos y los practicantes pueden alcanzar un refinamiento del espíritu y del cuerpo. Su artículo citaba algunas observaciones de los practicantes tal como que Jiang Zemin, el antiguo dirigente del Partido Comunista chino, consideraba la popularidad de Falun Gong como una amenaza a su poder político. En consecuencia prohibió la práctica en 1999 y dio la orden de una persecución implacable y sistemática.
Según le informó un practicante, unos 1.450 seguidores de Falun Gong han sido perseguidos a muerte hasta ahora. Fotos, accesorios y actores fueron utilizados para mostrar cómo el grupo de Jiang trató de "convertir" a los practicantes a través de diversas formas de tortura, incluida la alimentación forzada, quemaduras de cigarrillos, choques eléctricos y meses de encarcelamiento en pequeñas jaulas.
El reportaje mencionaba que la exposición había sido presentada en unas quince ciudades y continuaría la ruta a través de todo el país. Citaba una declaración de Christina Jingha, una de las organizadoras del acontecimiento: “Creemos que la persecución contra Falun Gong es una persecución contra la conciencia. Es una persecución contra principios fundamentales que son cruciales para la humanidad”.
En la exposición, los visitantes fueron invitados a firmar una carta de petición para pedir al Gobierno chino el fin de la persecución. La carta será enviada a la Comisión de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas.
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