El Sr. Fan Dacheng, un practicante de Falun Gong que residía en el condado de Manasi, en la región autónoma de Xinjiang, persistía en practicar Falun Gong y en clarificar la verdad acerca de Falun Gong. Como resultado, él fue perseguido muchas veces. Los malhechores del campo de trabajos forzados de Changji de la ciudad de Wujiaqu en Xinjiang le maltrataron brutalmente hasta que casi muriera; entonces los miembros de su familia le llevaron a casa. Falleció el 12 de septiembre de 2004.
El Sr. Fan Dacheng, de cerca de 55 años, fue a Beijing para pedir justicia para Falun Gong en la primavera del año 2000. A su regreso, fue arrestado y detenido por la policía local. El Sr. Fan mantuvo una huelga de hambre para protestar por la persecución y consiguió salir de prisión con el poder de sus pensamientos rectos. Después de esto, se unió a un grupo que practicaba Falun Gong al aire libre y fue apresado una vez más. Saltó de un edificio para escapar y fue herido. Varios meses más tarde, pudo caminar de nuevo y fue a Beijing otra vez para apelar por Falun Gong. Después de su regreso, fue condenado a tres años de trabajos forzados. Él sufrió muchos diferentes tipos de torturas inhumanas y tormentos en el campo de trabajos forzados de Changji en la ciudad de Wujiaqu, en Xinjiang. Los funcionarios del campo de trabajos forzados de Changji usaban a los criminales encarcelados para golpear e insultar a los practicantes de Falun Gong que acababan de detener. También empleaban a dos criminales para vigilar a cada practicante de Falun Gong durante las veinticuatro horas del día.
Los practicantes de Falun Gong que han sufrido la persecución anteriormente han confirmado que allí tiene lugar una persecución depravada.
El campo de trabajos forzados y la prisión de Xinjiang, la compañía de responsabilidad limitada de tejido e hilado de lana Tianshan en Xinjiang y la fábrica de transformación especial Changji en Xinjiang se asociaron para llevar a cabo la tortura despiadada y la esclavitud de los practicantes de Falun Gong, obligándoles a realizar trabajos de alta intensidad durante 20 horas todos los días. Mucha gente no tenía la ocasión de dormir en una cama por períodos entre 10 días y dos semanas. Ellos tenían que manejar un telar permaneciendo de pie durante el día y la noche hasta que se les hincharan las piernas. Cuando ellos se dormían mientras hacían jerséis de lana, los guardias usaban las porras eléctricas para golpearlos y mandaban a los jefes de equipo (criminales recluidos) a que los golpearan sin piedad con ladrillos y porras de madera. Cuando era la hora de entregar los jerséis de lana terminados, los policías esposarían a aquellos que no habían finalizado la tarea a un respiradero de aire caliente. Los practicantes serían desnudados y golpeados con porras eléctricas en varias partes del cuerpo, incluyendo cuello, axilas, bajo abdomen, partes privadas, boca y orejas. Además, el período de prisión se les alargaría.
El 25 de Noviembre de 2001, todos los practicantes de Falun Dafa encarcelados en el campo de trabajos forzados de Changji solicitaron ser liberados, ya que ellos no eran culpables de ningún crimen. Ellos resistieron en el campo de trabajos forzados y se negaron a trabajar.
Durante los tres días siguientes, la policía simuló negociar y afirmó que mejoraría el entorno. En realidad, ellos encubiertamente incitaron a los criminales a impedir a los practicantes de Falun Gong que durmieran. Una vez que un practicante se quedara dormido, él o ella sería despertado. Después de tres días la policía usaba los métodos más inescrupulosos para engañar a cada practicante de Falun Gong y llevarlo a la sala de tortura. Dentro de la sala había por lo menos cuatro policías totalmente equipados con diferentes clases de aparatos de tortura (porras eléctricas, esposas, cuerdas, etc.). Sin atender a razones, esposaban al practicante y le ataban con cuerdas. Entonces el practicante sería golpeado por todo su cuerpo con porras eléctricas o con puñetazos o patadas. Después de eso, la persecución de los practicantes por los guardias del campo de trabajos forzados se hizo todavía más violenta. Una vez los guardias pegaron muchos carteles calumniando a Falun Gong en un pasillo. El practicante de Falun Gong Fan Dacheng continuó su huelga de hambre para pedir que se quitaran esos carteles difamatorios. Todos los practicantes de Falun Gong también enviaron fuertes pensamientos rectos. En poco tiempo la policía quitó los carteles.
Fan Dacheng fue torturado y sufrió tormentos en el campo de trabajos forzados de Chanji hasta que estuvo cerca de la muerte. Sólo entonces permitieron a los miembros de su familia llevarle a casa. Falleció el 12 de septiembre de 2004.
Versión en inglés:
http://clearwisdom.net/emh/articles/2005/7/5/62566.html
Versión en chino:
http://www.minghui.ca/mh/articles/2005/6/24/104760.html
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