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Desde el inicio de la persecución en 1999, el PCC prohibió a los practicantes de Falun Gong abandonar China aún habiendo cumplido todas las formalidades legales requeridas. Es uno de los numerosos medios utilizados en esta persecución a gran escala, además de la difamación en los medios de comunicación, la interferencia y las diversas privaciones en los ámbitos del empleo, los estudios, de la vivienda, las rentas y las pensiones de jubilación.
Aunque la inmensa mayoría de las órdenes relacionadas con la persecución sean transmitidas desde altos mandos exclusivamente de forma oral, existen pruebas escritas. En China, muchas agencias de viaje publicaron las condiciones necesarias para la obtención de un pasaporte y éstas establecen claramente que los practicantes de Falun Gong no están autorizados a realizar una petición de pasaporte, prueba evidente de la violación de los derechos humanos contra los practicantes de Falun Gong.
La sección 5ª de la "Petición de viaje a Hong Kong y Macao de ciudadanos chinos” publicada por el Servicio de Viajes de la Juventud China de Sichuan estipula:
“El departamento local de policía, en los casos donde la sociedad o el lugar de trabajo se encuentre inscrita en una lista de permiso de residencia, el director de la sociedad debería recomendar la aprobación o la negativa de toda candidatura basándose en los siguientes factores:
1. Las informaciones proporcionadas son exactas.
2. La persona no practica Falun Gong.
3. La persona no pertenece a las cinco categorías de gente no autorizadas a dejar el país.
4. La persona acepta pagar todos los gastos.
El director del departamento de policía o la sociedad debe poner un sello oficial tras la firma del documento.
Una búsqueda en Internet permitió recopilar numerosos ejemplos de la existencia de estas condiciones. Por ejemplo, el Servicio de Viaje Internacional de Guangxi Fangchenggang, el Servicio de Viaje de Shenzhen Pengcheng Kanghui, el Departamento Organizador del Partido Comunista Chino de la ciudad de Leping de la provincia de Jiangxi, la agencia de viajes de Zhejiang Shaoxing, el Servicio de Viaje de Xinyu Jiuzhou (bajo el formulario de petición de viaje internacional de los ciudadanos chinos para la provincia de Jiangxi), el Servicio Chino de Viaje Internacional de Datong, el Departamento de Seguridad de la universidad de Sichuan y el Servicio Postal Provincial de Guangdong, piden totalmente el respeto de estas condiciones.
Las cinco categorías de personas que tienen prohibido abandonar el país son definidas en la sección ocho de la "Ley de la República Popular de China sobre el control de las entradas y salidas de los ciudadanos”.
La primera categoría incluye a los acusados en un proceso criminal bajo la inspección del sistema judicial y los sospechosos identificados por la policía, el sistema de Seguridad del Estado o la Procuraduría del Pueblo.
La segunda categoría incluye a los que están implicados en procesos civiles que conciernen a asuntos domésticos y otros litigios (degradaciones, herencia, contrato, deudas).
La tercera categoría incluye a criminales condenados a pena de prisión.
La cuarta categoría incluye a las personas en los campos de trabajo por haber violado la Ley.
La quinta categoría concierne a los funcionarios e investigadores que conocen informaciones y tecnologías de alto secreto, cuya salida de China podría causar daños importantes y económicos o una amenaza para la seguridad de la Nación.
Los practicantes de Falun Gong, las personas que practican de corazón “Verdad, Compasión y Tolerancia” no pertenecen a estas "cinco categorías". Incluso el PCC lo sabe. Como los practicantes de Falun Gong son inocentes, el PCC les puso en una lista por separado (aparte de los casos cubiertos por las leyes y las reglamentaciones) para privarles del derecho a dejar China. En la persecución de Falun Gong, los votos de Jiang Zemin y del PCC están por encima de las leyes. Tales ejemplos de derogación de las leyes son omnipresentes.
Además del deseo depravado de causar intencionalmente sufrimiento a otros, forjado a lo largo del reinado del PCC, la razón fundamental por la cual Jiang Zemin y el PCC prohíben a los practicantes de Falun Gong abandonar China, es que piensan que teniendo bajo custodia a los practicantes, los horribles crímenes cometidos durante la persecución no serán descubiertos por el mundo.
Así como la orden de “matar sin piedad” a los practicantes de Falun Gong que hacen saber la verdad sobre la persecución, la privación del derecho de los practicantes de Falun Gong de dejar China, es otro medio perverso para esconder la verdad. Sin embargo, estas tentativas fracasaron totalmente. La verdad de la persecución ha sido hecha pública en el mundo entero.
La Sra Li Weixun, una practicante de Falun Gong de Shenyang, China, escapó del control del PCC y obtuvo el estatuto de refugiada gracias a la Alta Comisión de las Naciones Unidas sobre los Refugiados (ACNUR) cuando se encontraba en Tailandia. Llegó a los Estados Unidos el 21 de septiembre de 2005 gracias a la asistencia de la Asociación Friends of Falun Gong, ACNUR, el Departamento de Estado de los Estados Unidos, el Congreso americano y otras ONGs.
La Sra. Li pudo llegar a los Estados Unidos a pesar del hecho de que no tenía ningún familiar allá. El esfuerzo realizado para socorrerla reflejó la comprensión por parte de la comunidad internacional de la realidad de la persecución. La Sra. Li va a poder suministrar información sobre la persecución llevada a cabo por parte del PCC.
Por otra parte esto es lo que más teme el PCC. Las reglamentaciones mencionadas anteriormente que conciernen a las peticiones de pasaportes y la prohibición a los practicantes de Falun Gong de viajar al extranjero es una prueba de la naturaleza depravada y secreta de la persecución.
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