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Los discípulos de Dafa de nuestro pueblo comenzaron a practicar Falun Gong después de que comenzara la persecución el 20 de julio de 1999. Con el fin de validar Dafa y salvar a los seres conscientes, los practicantes distribuyeron impresos y carteles de clarificación de la verdad por todas partes, en todo el pueblo y en la ciudad. Se pusieron mensajes de Dafa en todos los sitios, sobre las grandes avenidas y las pequeñas calles.
En el invierno de 2000, los practicantes estuvimos enfrentados a la violencia de la policía. Detuvieron a varios de nosotros, en violación de la constitución china. Ocho policías golpearon a un practicante al mismo tiempo. Uno tiraba de sus cabellos, otros dos le inmovilizaban las manos y el resto lo golpeaba. Todos nosotros fuimos brutalmente apaleados y nuestras caras sangraban. Era insoportable vernos mutuamente con los ojos hinchados y sangrando.
A pesar de la gran presión y las condiciones horribles de la persecución, muchos de nosotros tuvimos el mismo pensamiento en el espíritu: « Falun Dafa es grande » y « Falun Gong no será eliminado ». Aunque estábamos heridos y sangrando, no cedimos.
El alcalde de nuestro pueblo apenas podía retener las lágrimas cuando nos vio magullados de tal modo. Suplicó a la policía que no nos golpeara más. El incidente hizo comprender al alcalde de nuestro pueblo la fuerza de Dafa y la firmeza de nuestra creencia.
Todos los practicantes de Dafa de nuestro pueblo son buenos ciudadanos que obedecen las leyes. Por ejemplo, cuando tuvimos que entregar nuestra cosecha de arroz, lo hicimos antes de la fecha límite, y vendimos un arroz de alta calidad. En la temporada seca, cuando las huertas debían ser regadas, los practicantes de Dafa no se peleaban por coger el turno y no tomaban más agua de la que tenían derecho. Durante las vacaciones limpiábamos las avenidas y las calles, y luego poníamos letreros en donde decía « Falun Dafa es grande ». La mayoría de la gente de nuestro pueblo comprendió que los practicantes de Dafa verdaderamente eran buenas personas.
Para validar Dafa y ofrecer la salvación a aquellos cuyos espíritus habían sido envenenados por mentiras, hicimos mucho por clarificar la verdad. Lo hacíamos ya fuera lejos o cerca, o estando oscuro y con la calle resbaladiza. Los que no comprendían la verdad a pesar de todos nuestros esfuerzos desgarraron los materiales que fijamos una noche. Entonces los fijamos de nuevo. Después de hacer esto muchas veces, sentimos que continuar así no resolvería el problema. A través de nuestros esfuerzos descubrimos a la persona que se llevaba los carteles y le dijimos: « Falun Dafa le ofrece la salvación a la gente. Quitar eslóganes que clarifican la verdad le conducirá a la catástrofe ». Le ayudamos a comprender la verdad. Desde entonces, nadie destrozó más nuestros materiales.
Después de que los Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista fueran publicados, estudiamos la Ley y escuchamos los Nueve comentarios por la noche, y durante el día animamos a la gente a retirarse del PCC. Oímos muchos insultos y reproches mientras hablábamos a la gente. Soportamos palabrotas que nadie desea oír, pero todavía les explicamos pacientemente la verdad. Por fin, les hicimos comprender que Los Nueve comentarios pueden ayudarles a escapar del control del espectro perverso del PCC, y proporcionarles un luminoso futuro. Poco después, decidieron retirarse del Partido. A día de hoy, más de 200 personas de nuestro pueblo se han retirado del PCC y de sus organizaciones afiliadas.
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