Xueli es una persona buena y sincera que trabajó en China durante casi veinte años. Es una excelente educadora y muy experimentada. Xueli sufría varias enfermedades tales como anemia, bajadas de tensión, dolores menstruales, acidez de estómago, depresión y problemas cardíacos. Había sufrido también una operación del oído. Xueli no gozaba de salud y a veces le tenían que inyectar para sobrevivir.
Hace más o menos seis meses, Xueli y una docena de colegas comenzaron a practicar Falun Dafa. Esto tuvo efectos significativos sobre su salud física y mental. Xueli reencontró la salud, ganó peso y consiguió un estado de salud estable. Este año, su escuela le asignó otras tareas más de trabajo administrativo, pero se sentía alegre y llena de energía a pesar de tener más trabajo.
Xueli siente las maravillas de Falun Dafa cuando lee el libro Zhuan Falun y cuando practica las cinco series de ejercicios de Falun Gong. La primera vez que hizo el segundo ejercicio “Vía de la estaca parada Falun” sintió durante un momento, contraerse sus músculos espontáneamente a la altura de las pantorrillas, caderas, muslos, espalda, hombros, mejillas y orejas como si alguien le golpeara el cuerpo por todas partes. Sintió como se aceleraban los latidos de su corazón y sus oídos bombeaban en el interior al ritmo de la energía. Todo este proceso era extraordinario.
Cuando Xueli hacía el movimiento de “llevar Falun a la altura del vientre”, la segunda parte del segundo ejercicio, sentía claramente que tenía un globo azul lleno de energía que se dilataba tanto que tenía que usar toda su fuerza para mantenerlo y no perder el equilibrio. Cuando hacía el movimiento de "llevar Falun a la altura del vientre” el globo se volvía a veces pesado y a veces ligero. Cuando hacía el movimiento de "llevar Falun por encima de la cabeza" sentía que todo su cuerpo se envolvía en una capa de energía, su cuerpo sentía calor y la energía circulaba fuertemente entre sus brazos. Cuando hizo el movimiento "llevar Falun a ambos costados de la cabeza” sintió de nuevo la energía bombear sus oídos. Realmente todas estas cosas las sintió y no fueron imaginadas.
Después de un tiempo de limpieza de su cuerpo, todas las enfermedades de Xueli desaparecieron y comenzaba a irradiar una belleza natural. Ya no necesitaba más bajas por enfermedad y tampoco tenía que utilizar más su tarjeta de la Seguridad Social. Y todavía algo más importante, se liberó de sus apegos y en consecuencia sus temores de la vida de cada día desaparecieron. Su vida se volvió libre y plena, y su cuerpo tuvo un mejoramiento físico y mental. Xueli comprendió bien las tres cosas que un practicante debe hacer y a menudo sale para exponer la persecución y ofrecer a otros la posibilidad de gozar de la práctica como ella, haciendo grandes esfuerzos para asimilar los principios de Verdad, Benevolencia y Tolerancia.
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