Purificándome a mí mismo mediante la práctica de Falun Dafa

Me gustaría compartir mis experiencias en la cultivación, siendo un practicante durante los últimos siete años. El ser como una partícula del Fa, me hace entender que escribir acerca de mis experiencias es una manera de validar la magnificencia de Falun Dafa.

Estudiando el Fa
La clave para mejorar mi carácter es mirar dentro de mi interior y estudiar el Fa. Me esfuerzo a leer constantemente uno o dos capítulos de Zhuan Falun y memorizo dos páginas del libro cada día, sin importar lo ocupado que esté. Ahora, estoy memorizando el libro por séptima vez. Aprendo de memoria los poemas de Hong Yin y Hong Yin II una vez al día, y también los artículos de las "Escrituras para mayor avance". Creo que este proceso de memorizar el Fa es un proceso de eliminar los apegos. Teniendo el Fa en mi corazón me ayuda a pasar con más facilidad las tribulaciones. Leo sistemáticamente los nuevos artículos y conferencias del Shifu una y otra vez. De esta forma mi egoísmo y distracciones se reducen y mis pensamientos rectos son más fuertes. Como resultado, ofrecer la salvación/salvar a seres conscientes se hace más fácil para mí.

Todos los días hago los ejercicios y eso me ayuda a eliminar la pereza y mejorar mi fuerza de voluntad. Recuerdo que cuando comencé a hacer el ejercicio quinto, ni siquiera podía hacer el medio loto con las piernas. Las piernas me dolían de tal manera que mi cuerpo temblaba y se me caían las lágrimas y el sudor como lluvia. Sin embargo, insistía en hacer el quinto ejercicio durante media hora. Me tomó dos años para poder hacer el doble loto con las dos piernas cruzadas. Fue un período difícil para mí. Shifu, dijo:

"Es imposible que cada uno obtenga el Dao, y aun para aquellos que puedan continuar refinándose con determinación, todavía hay que ver si pueden completar la cultivación o no, y también si pueden tener la determinación de cultivarse o no; no es posible que cada uno se vuelva un Fo". (Lección Segunda de Zhuan Falun)

Recordando las palabras del Shifu, estoy haciendo los ejercicios todos los días durante dos horas.

Envió pensamientos rectos las cuatro veces al día. Si por alguna razón no soy capaz de enviar pensamientos rectos durante una de las horas establecidas, lo hago más tarde. Al enviar pensamientos rectos, se puede lograr eliminar a muchos seres perversos en otras dimensiones y las interferencias disminuyen, y nos ayuda a salvar a más seres consientes.

Eliminando el apego a la lujuria
"El deseo sexual, la lujuria, todas estas cosas pertenecen a los corazones humanos de apego, todas estas cosas deben ser eliminadas". (Zhuan Falun)

Sigo los principios del Fa de Shifu para guiar mi conducta. Cuando surgen pensamientos y acciones desviadas, les suprimo. Como resultado, ya no surgen con tanta frecuencia, y Shifu nos ayuda a eliminar estas cosas malas.

Una vez tuve un sueño, y en ese sueño me enamoré de un hombre que no era mi marido. Recuerdo que me sentí muy feliz y bendecida en el sueño. Después me desperté, sabía que todavía tenía un apego a la lujuria y mire dentro de mí. Antes de casarme, tuve muchos pretendientes en mi lugar de trabajo y estaba muy orgullosa de mí misma. Después de casarme, me arrepentí de haberme casado tan pronto. A veces, me recuerdo la maravillosa sensación de ser apreciada por el sexo opuesto. Después, encontré mi apego (en que estaba apegada) y me centré en eliminarlo. Tan pronto como tenia pensamientos de lujuria, enviaba pensamientos rectos para eliminar el apego. No he tenido sueños acerca de otros hombres durante mucho tiempo, y siempre me recuerdo de mantener fuertes pensamientos rectos, en caso de que resurjan los pensamientos de la lujuria.

Salvando seres conscientes
Antes del 2008, mi casa era un sitio donde se producían los materiales que aclaran la verdad. Hicimos volantes informativos, folletos y CD sobre Falun Gong y los hechos de la persecución. Mi suegra imprimía los materiales y mi esposo era el encargado de las cuestiones técnicas. Estuve trabajando día y noche para tratar de salvar más gente posible.

A partir del año 2008, con mi suegra salíamos a repartir materiales que aclaraban la verdad- si los demás practicantes no estaban disponibles. Sobre todo íbamos a aldeas lejanas por la noche.

El área donde vivimos es muy montañosa. A veces tenemos que subir unas cuantas montañas antes de llegar a un pueblo. También, hubo ocasiones en que teníamos que caminar entre hierbas muy altas, porque no habían carreteras. Algunos de los pastos son tan profundos que nos cortaban la piel. Para la distribución salíamos de tres a cuatro días a la semana y caminábamos de 15 a 20 kilómetros cada vez. Hemos desgastado muchos zapatos.

Mi suegra tiene casi 70 años. Mientras yo estaba en la cárcel, ella aprendió a utilizar el ordenador para acceder a la página de Internet y a descargar artículos para el material de aclaración de la verdad.

Una vez fui a mi ciudad natal y traje más de 1.000 ejemplares de materiales que aclaran la verdad, para distribuir. Para poder distribuir todo el material, me tomó seis horas durante tres noches.

La primera noche, apenas salí de la casa de mis padres, empezó a llover. No llevaba ningún paraguas y pedí a Shifu que disminuye la lluvia. Esa noche, ni siquiera me ladró un perro. Después de distribuir todos los materiales, seguía lloviendo. Sin esperar que la lluvia pare me dirigí de regreso a casa. Quería llegar a casa lo antes posible, antes del amanecer y antes que mis padres se despiertan para que no se preocuparan por estar fuera durante la noche. Pedí a Shifu, que no permita que mis ropas se mojen. Cuando llegué a casa, mis ropas estaban secas, excepto las mangas. Estaba muy agradecida por el coraje y la protección del Shifu.

La segunda noche cuando salí para la distribuir los materiales, vi una casa con la puerta abierta. Dije a Shifu, que por favor que cierre la puerta para que pudiera distribuir los materiales, sin que nadie me vea. En el momento que lo pensé, la puerta ya estaba cerrada. A medida que continuaba caminando por la calle con el frío, pisé sin querer una botella e hice un ruido muy fuerte. Alguien abrió la ventana y miró hacia fuera. Me quedé quieta y esperaba que la persona no me viera. Como resultado, cerró la ventana y se volvió a dormir. En una casa, cuando metía un volante de bajo de la puerta, me di cuenta que había un perro. El perro hizo algunos movimientos, pero no ladró. De vuelta a casa, sentía que había un rayo de luz suave que iluminaba mi camino. Llegué a casa alrededor de las 5:00h de la mañana y mis padres todavía estaban profundamente dormidos.

A la tercera noche, distribuí todos los materiales que me quedaban. Entonces les conté a mis padres los milagros que había experimentado durante las tres últimas noches. Mi padre no podía creer, que yo tenía el coraje de caminar por las calles sin luz. Mis padres empezaron a creer que Shifu no era una persona común. Previamente, estaban en mi contra respecto a mi practica de Falun Gong porque creían en las mentiras del régimen chino. Después de aclararle los hechos de la persecución a mi padre, él aceptó Falun Gong y comenzó a leer los libros.

Versión en chino disponible en: http://minghui.ca/mh/articles/2010/7/13/226928.html

Versión en inglés disponible en: http://www.clearwisdom.net/html/articles/2010/8/7/119111.html