Saludos a Shifu, saludos a mis compañeros practicantes.
Mi nombre es Roberto, soy nacido en Madrid. Me gustaría compartir con ustedes, algunas de mis experiencias y entendimientos actuales en mi cultivación.
Obtuve el Fa en enero del año 2007. Han pasado mas de tres años en un abrir y cerrar de ojos y aún recuerdo a menudo ese día, cuando, paseaba por el parque y vi de lejos unas personas sentadas haciendo la meditación. En ese instante, una profunda sensación recorrió mi cuerpo, la sensación de haber regresado a casa.
En este tiempo relativamente corto de cultivación en Dafa, he experimentado cambios muy sustanciales, tanto en mi entendimiento sobre Dafa, como en las situaciones externas que se han producido en mi vida. Puedo percibir los arreglos de Shifu proveyéndome de las circunstancias necesarias para abandonar mis apegos fundamentales y proporcionándome a su vez las condiciones para establecer mi poderosa virtud como Dafa Dizi del periodo de la rectificación del Fa.
Es por ello que desde junio de este año, varios practicantes hemos empezado a compartir un mismo piso como vivienda. Para mi, esto me ha servido de estímulo para ser más diligente en muchos aspectos: Tomar con mayor rigor el envío de pensamientos rectos, la práctica de los ejercicios, el estudio del Fa en grupo, así como dar pasos al frente en la validación del Fa y la salvación de seres conscientes.
Todos los días, a primera hora de la mañana, empezamos la jornada con los ejercicios. A las siete y media, nos unimos todo el equipo de trabajo en la oficina de La Gran Época para estudiar el Fa, y seguidamente realizamos un pequeño intercambio antes de empezar con nuestro trabajo para el periódico. Los intercambios, cada día son más enriquecedores, y en conjunto nos hacen llegar a entendimientos más altos, hasta que al final todos comulgamos muy fácilmente. Todos coincidimos en que se está elevando rápidamente el xinxing de los practicantes y ésto se refleja en la respuesta que estamos obteniendo en la búsqueda de publicidad para el periódico.
Los conflictos entre nosotros duran muy poco, e inmediatamente los ponemos sobre la mesa para aprender de ellos. En cada conflicto, todos podemos aprender y mejorarnos mirando hacia dentro. De esta forma las diferencias se disuelven rápidamente y la coordinación y la comunión en los pensamientos se hacen uno más fácilmente.
Por ejemplo, hace unos meses, surgió un conflicto muy curioso. Un practicante encargado de llevar los periódicos por carta a los diputados y senadores españoles se fue de vacaciones, y la coordinadora de distribución de Madrid nos delegó esa función a un compañero y a mi. Ella no estaba segura donde se debían dejar los sobres y preguntó a otro practicante para que le confirmara el sitio exacto. Inexplicablemente este último le indicó el lugar erróneamente con cierta seguridad, por lo que finalmente hicimos mal la entrega.
La coordinadora le pidió explicaciones de por qué le había confirmado tal hecho con tanta rotundidad sin estar seguro. A lo cual él contestó de muy malas formas, desmintiendo que hubiera hecho tal afirmación.
Después del incidente, intercambiamos y coincidimos en ver las deficiencias de cada uno de nosotros. En medio de este conflicto, se expuso y salió a la superficie una falta de tolerancia y compasión de este practicante, del cual salieron palabras inconscientes controladas por sus emociones negativas. Y por otro lado, se expuso una falta de responsabilidad y seriedad en nuestro trabajo y en el de la coordinadora, que se tradujo en una mala coordinación . Así, después de mirar cada uno hacía dentro, encontramos nuestros apegos y pudimos elevarnos a través del conflicto.
Ahora mismo, soy un novato e inexperto comercial, y durante la venta de publicidades, el coordinador a menudo me critica por tomar las cosas ligeramente.
Entonces, muchas veces, me miro dentro y me pregunto ¿ estoy aprendiendo de su decoro y seriedad al hacer las cosas?. ¿ Puedo apreciar e igualar el esfuerzo y peso que lleva siempre en todas las actividades de Dafa. Cada vez siento más intensamente cómo los conflictos y malentendidos inexplicables entre los practicantes son en realidad una gran oportunidad para elevarnos, que viene de la gracia de Shifu.
Cuando las desavenencias en las formas de hacer las cosas se intensifican y se prolongan mucho en el tiempo, no se producen resultados en el trabajo. Cuando nuestro corazón se eleva en medio de un conflicto, todo el conjunto se está elevando y el campo de energía se hace más y más grande y poderoso, restringiendo todos los obstáculos.
En muchas ocasiones yo he cuestionado obstinadamente y con apegos las formas en que se estaba llevando la distribución y marketing del periódico. Hace un tiempo, yo consideraba que debíamos repartir el periódico en el centro de Madrid, pero el coordinador, estimó más oportuno llevar la distribución del periódico a la periferia de la ciudad, donde el nivel adquisitivo de los ciudadanos es más alto. Durante los intercambios, dedicaba mucho tiempo en exponer mis criterios como los más acertados. Sin embargo, con los estudios del Fa posteriores, entendí progresivamente como cooperar mejor, aceptando que el coordinador pudiera tener con toda seguridad una visión más global que yo. Por mi parte, sentí que debía cooperar en cualquier situación, sin protestar ni criticar incesantemente, evitando afectar el ánimo de los demás y creando obstáculos en el trabajo del coordinador. De esta forma podríamos aprovechar mejor el tiempo para validar el Fa. Entendí que no debemos tener actitudes y pensamientos opuestos entre nosotros, si no una vocación por ayudar incondicionalmente.
Mi entendimiento es que más que nunca, los Dafa Dizi tienen que estar unidos: como las partículas microscópicas que conforman el gong, como los canales de energía de nuestros cuerpos que llegan a unirse en un solo bloque desapareciendo en sí como tales, o como el inquebrantable e indestructible diamante.
También puedo apreciar como los obstáculos que surgen en nuestro entorno, en muchas ocasiones, son interferencias de las viejas fuerzas para ponernos a prueba. Las viejas fuerzas se agarran a nosotros para interferirnos, y solo con un buen estudio del Fa y un solido ambiente de cultivación en grupo, todas las interferencias se pueden desvanecer.
Antes, aunque también estudiaba y practicaba los ejercicios, no podía garantizar hacerlos cada día. Ahora, con el estudio diario en grupo por las mañanas, el estudio por las noches con los practicantes de toda España, y los intercambios constantes entre nosotros, puedo sentir la elevación de mi xinxing, al mismo tiempo, percibo cambios positivos en mi entorno y familia y una mayor eficacia en mi trabajo para La Gran Época.
En cuanto a la publicidad, en el pasado, a pesar de de los esfuerzos por parte de todos por contactar con clientes, estuvimos largo tiempo sin conseguir entrevistas y sin respuestas positivas. Entonces me sentía avergonzado y frustrado por no saber como realizar las labores comerciales. Era algo que me parecía sumamente difícil. Sin embargo, desde que empezamos a estudiar el Fa en grupo e intercambiar diariamente, nuestros entendimientos se elevaron rápidamente y en muy poco tiempo se produjeron grandes cambios. Hemos llegado a tener entrevistas con clientes casi todos los días de la semana, mostrando gran interés por el periódico. Incluso hemos llegado a hacer tres entrevistas en un mismo día. Hoy estamos viendo ya los frutos de actuar más diligentemente.
Shifu insiste incesantemente que estudiemos más y más el Fa. Antes no podía entender mucho, pero ahora siento con más profundidad sus palabras. Dafa es sobrenatural y todopoderoso, no importa cuan grande son las pruebas y dificultades; podemos superarlas solo haciendo caso a lo que nos ha enseñado Shifu.
Al mismo tiempo estoy notando como mi entorno familiar se rectifica suavemente. Cuando empecé a practicar Falun Dafa, mi madre me observaba en silencio respetuosamente pero ella no quería practicar. Con el tiempo, según elevaba mi xinxing, su postura a ido cambiando poco a poco y ahora a comenzado a practicar los ejercicios y a estudiar el Fa. Mis dos hijas, me acompañan siempre que hay oportunidad en la aclaración de la verdad y los ejercicios en el parque. He observado que por primera vez en años, la piel de mi hija mayor ha mejorado muchísimo de su dermatitis, al igual que su rendimiento en el colegio, y a pasado de necesitar ayuda extra escolar, a ser responsable y alagada por su profesora. Ademas, su carácter se ha vuelto más extrovertido.
Para finalizar mi experiencia, me gustaría contar un caso muy gracioso con la publicidad:
Un día, en la cafetería mientras desayunaba, empece a ojear las publicidades de un periódico. Entonces vi una publicidad que me chocó de una empresa de colchones de cama hechos artesanal mente. Subí inmediatamente a la oficina y concerté una entrevista con el distribuidor de esa marca en España el lunes siguiente. Esa persona sintió gran curiosidad por el periódico, lo cual me sorprendió mucho.
El mismo lunes, antes de la entrevista con el responsable de esta empresa, llamé a la clínica en la cual trabajo por las tardes como acupuntor, para confirmar mis tratamientos. Aún recuerdo los nombres de las primeras personas: Lotzarina y José María, a las tres de la tarde. Debíamos darnos prisa.
Cuando llegamos a la entrevista en cuestión, adivinen quién estaba allí para recibirnos: Lotzarina y Jose María, empleada y jefe respectivamente de la empresa de colchones. ¡Vaya que sorpresa por mi parte cuando los vi!, y no menos la suya cuando me vieron con mi traje impecable, mi corbata y mi maletín. Realmente fue una lástima no haberme llevado las agujas conmigo, pues las camas las teníamos en el mismo establecimiento. Finalmente terminamos la entrevista amistosa y alegremente con el acuerdo de colaborar mutuamente en adelante.
Con el estudio del Fa y pensamientos rectos, la magia de Dafa siempre estará con nosotros. Shifu nos está ayudando, arreglando nuestro camino para cumplir nuestros votos históricos salvando seres conscientes. La magia se hace tangible cuando nuestros pensamientos se hacen más y más rectos.
Estas son las experiencias obtenidas a través de mi cultivación personal.
Muchas gracias a Shifu, muchas gracias a los compañeros practicantes.
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