"En nuestra declaración en este artículo de 2001, presentamos el terrorismo de Estado en China que afectaba a millones de practicantes de Falun Gong. Desde aquel momento, los tribunales de los Estados Unidos establecieron acciones legales contra los altos funcionarios chinos que habían recibido una asignación mientras estaban en los Estados Unidos, por violación flagrante de los derechos humanos en contra de los practicantes de Falun Gong. Nuestra organización participó en varias de estas acciones legales con éxito. Ahora, estamos satisfechos de que los tribunales en Tanzania muestren la misma inclinación que permita una acción legal. En efecto, el 3 de agosto de 2004, un tribunal de Tanzania aceptó un juicio preliminar contra un miembro del Consejo de Estado chino. También hicimos saber sobre el incidente de disparos perpetrado sobre un practicante de Falun Gong en Sudáfrica el 28 de junio de 2004. Esta víctima es un australiano, llegado a Sudáfrica para protestar por los crímenes de los altos funcionarios chinos que estaban de visita en este país. Los presuntos responsables del terrorismo contra Falun Gong son los funcionarios de la “oficina 610”. Estamos satisfechos de que las autoridades de Sudáfrica estén investigando el asunto. Sin embargo, debemos subrayar que las autoridades chinas están persiguiendo a los practicantes de Falun Gong fuera de sus fronteras desde hace varios años."
En agosto de 2001, el Desarrollo Internacional para la Educación (IED) hizo una declaración que condenaba la persecución de Falun Gong y la describía como "terrorismo de estado". Este departamento pidió a la subcomisión de las Naciones Unidas para la promoción y la protección de los derechos humanos y a la comunidad internacional poner término a tal comportamiento terrorista. El departamento hizo saber en su declaración que "familias enteras fueron rotas porque algunos de sus miembros habían sido asesinados por el régimen, otros destruidos por torturas graves, por el encarcelamiento en hospitales psiquiátricos donde recibieron crueles tratamientos o bien por trabajos pesados en los campos de trabajos forzados y por otras prácticas de este género. Según un informe de agosto de 2001 del International Herald Tribune, se supone que el régimen oficialmente dio órdenes de violencia contra los practicantes con el fin de eliminar Falun Gong. Y en agosto de 2004, en la 56ª sesión de la subcomisión de las Naciones Unidas para la promoción y la protección de los derechos humanos, el Desarrollo Internacional para la Educación recordó en su declaración su intervención de agosto de 2001.
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