El campo de trabajos forzados Masanjia somete a las practicantes a trabajo de esclavos

Las practicantes de Falun Gong son tratadas como esclavas en el campo de trabajos forzados Masanjia en la ciudad de Shenyang, provincia de Liaoning, para hacer artesanías como “hadas mariposas”, enredaderas, sombreros, horquillas y otros artículos para exportar.

Artesanías para exportar hechas por las practicantes de Falun Gong en el campo de trabajos forzados Masanjia

Cada día de lunes a viernes, a las 7:30 de la mañana, las practicantes son forzadas a leer información y libros difamando a Falun Dafa. Una corta pausa sobreviene alrededor del mediodía y las labores manuales recomienzan a la 1 y duran hasta las 8:30 p.m., algunas veces se extienden hasta las 10. Cada día hay nuevas asignaciones y las manos de las practicantes se hinchan debido a estas intensivas tareas. Las artesanías de la sección nº 2 de mujeres del campo de trabajos forzados Masanjia son creadas en dichas condiciones.

Desde el 8 hasta el 11 de abril, llegó de visita un grupo de inspección, pero los oficiales de Masanjia ordenaron a las detenidas que ocultaran la situación real y que en cambio cantaran y bailaran. Después que el grupo de inspección se retiró, la tarea manual se reanudó.

Cada mañana, a las 10-20 practicantes que están en una habitación se les da cinco minutos para lavarse la cara y los dientes. Es un programa sumamente ajustado.

La mayor parte del tiempo, a las practicantes les dan tortitas de harina de maíz, cubiertas con moho y tierra, y una sopa roja que es hecha de rebanadas de patata con un poco de saludable piel en ella. En verano, la harina y el arroz estaban cubiertos por moho.

En marzo de 2003, la sección nº 2 del campo atormentaba y abusaba aún más de las practicantes de Falun Gong. Pusieron ocho camas dobles de tamaño estándar en una habitación simple. Debido al pequeño espacio, ellos ubicaron cuatro camas encima de otras cuatro, asignando cuatro personas a cada cama. A las practicantes se les exigía que se levantaran a las 5:00 a.m. diariamente y eran obligadas a hacer ejercicios físicos, después de lavarse las caras. A las 7:00 p.m. se les exigía que vieran las noticias de la tarde en la TV. Exceptuando las tres comidas, eran forzados a hacer labores físicas cada día, mañana y tarde, por lo menos 12 o 14 horas. Algunas veces trabajaban en artesanías para exportar a países desconocidos; otras veces hacían jerséis de punto a mano para el mercado sur coreano, y otras veces se les exigía trabajar en ropa para exportar, como coser botones y otras tareas.

Durante las horas de trabajo, había establecido un tiempo para usar el baño. Treinta y dos personas de una habitación hacían turnos; no tenían permitido hacer contactos con practicantes de otras habitaciones. Ocasionalmente, cuando había una urgente necesidad de producción, se obligaba a las practicantes a trabajar hasta tarde, al menos hasta las 10:00 p.m. Cuando el trabajo menguaba, a las practicantes tampoco se les permitía descansar. En lugar de eso, se las forzados a pasar por sesiones de lavado de cerebro, como leer artículos difamando a Falun Dafa, colección de palabras del presidente Mao e historias sobre Lei Feng (1), o cantar y bailar. Con respecto a las practicantes aún no “reformadas” (que no han renunciado a sus creencias), las colaboradoras (2) eran usadas para lavarles el cerebro con engañosas teorías toda la noche entera. Las practicantes que resistían sus esfuerzos eran castigadas físicamente, abofeteadas, tirado de los pelos y golpeadas sus cabezas contra la pared y también pellizcaban sus piernas. La carne de las practicantes es pellizcada hasta que queda lacerada; el pus que fluye traspasa la ropa, y ellas son incapaces de caminar debido al dolor.

Con respecto a esas 16 practicantes determinadas que no quisieron renunciar a Falun Dafa, los guardias del campo de trabajo forzado las sacudieron con bastones eléctricos hasta que sus carnes y mandíbulas estuvieron quemadas.

Notas:

• 1.Lei Feng: Un hombre del ejército chino de 1960 quien era extensamente elogiado por su moral, conocimiento, desprendimiento y generosidad.
• 2. Colaboradoras: Ex practicantes de Falun Gong que se han desviado debido al lavado de cerebro y la tortura.

Versión en chino disponible en:
http://www.minghui.org/mh/articles/2004/9/26/85009.html