1. Los practicantes se ubicaron cerca de la salida del aeropuerto con banderas: Falun Dafa es bueno, Rescatar a los practicantes de Falun Gong perseguidos en China y Juicio a Jiang Zemin con los otros tres malvados. Todos en los automóviles de la delegación vieron las banderas, incluyendo a Hu.
2. Un segundo grupo de practicantes estaba frente al Hotel Hilton, en un pequeño parque directamente enfrente de la entrada, con banderas similares.
3. La Prefectura (a cargo de los canales donde el Hilton está localizado) está a cargo de la seguridad fuera del Hilton. Su intención parecía ser la de no permitir a los practicantes cruzar la calle que divide al Hilton del parque con banderas. Sin embargo, podíamos cruzar la calle sin banderas.
4. La policía se ubicó en la calle frente al parque en una fila, como una pared. Les aclaramos la verdad.
5. Cinco personas que parecían transeúntes normales aparecieron. Dos mujeres empezaron a gritar obscenidades a los practicantes, diciendo: “Váyanse, no los queremos en Argentina, etc.”. Las otras 3 personas observaron en silencio.
6. Los automóviles llegaron. Todos los autos deben detenerse unos minutos y esperar para ingresar a la entrada del Hilton. Los practicantes levantaron sus banderas.
7. De repente, las tres personas de civil empezaron a agarrar una larga bandera sostenida por dos practicantes. Sin embargo, otro practicante pudo bajar a la calle y sostener una bandera el tiempo suficiente para que los pasajeros en varios automóviles leyeran el contenido. Esta bandera luego fue quitada por la policía, que la llevó a un patrullero. Más tarde la policía la arrojó en un arbusto, así que pudimos recuperarla.
8. Nos acercamos a las tres personas y les pedimos las credenciales y le preguntamos por qué querían quitarnos la bandera. Ellos decían ser policías pero no mostraban ninguna credencial. Le pedimos a un camarógrafo de la televisión que los filmara a ellos y a las dos mujeres que nos insultaron. Ellos corrieron. Luego los volvimos a ver en la puerta del hotel hablando con alguien. Ellos obviamente fueron contratados por la embajada para hacer el trabajo sucio de quitar las banderas, ya que las autoridades argentinas no lo harían.
9. Un guardia de seguridad le negó la entrada al hotel Hilton a un practicante, diciendo que el hotel estaba cerrado al público. Observamos que eso no era cierto, ya que toda clase de personas entraban al hotel.
10. Cuatro practicantes se quedaron en el parque a esperar que Hu saliera a las 17:00 hs para encontrarse con el presidente en la casa de gobierno, a 5 minutos en auto.
11. Poco antes de las 17:00 hs, unos hombres chinos aparecieron y trataron de quitar la bandera sostenida por dos practicantes, en la esquina de la calle al costado del parque. Ellos no la soltaron y la bandera fue rota en pedazos, también un teléfono celular fue robado por los chinos. Un auto policial llegó y se llevó a uno de los chinos. Durante este tiempo, alrededor de 30 chinos aparecieron desde adentro del hotel y cruzaron la calle para sentarse en el parque. Alrededor de 8 policías los llevaron hacia otra parte del parque. Pero justo antes de que Hu saliera, los policías le dijeron a los practicantes “Tenemos órdenes de retirarnos, arréglense como puedan” y se fueron en fila del parque. Apenas el último oficial terminó de bajar el escalón de la vereda, los 30 chinos se ubicaron delante de los practicantes y comenzaron a tratar de quitarles la bandera. Algunos tenían navajas, y comenzaron a cortar las banderas. Los 4 practicantes protegieron las banderas y fueron golpeados. Un chino mordió a una practicante en un brazo. Todas las banderas fueron destruidas o quitadas.
12. Luego los 30 hombres se fueron hacia la casa de gobierno, donde otro grupo de practicantes estaba con banderas. Allí ellos también quitaron a la fuerza una bandera en chino e intentaron quitarnos una bandera larga. La táctica que usan es rodear a los practicantes, dejándolos en el medio de un círculo y formando una pared, de manera que nadie pueda ver lo que pasa dentro del círculo.
13. Los practicantes fueron por la tarde al Ministerio de Relaciones Exteriores, donde se realizaba una cena. Ellos sostenían banderas y meditaban en un pequeño parque frente a la entrada.
14. La policía de civil comenzó a presionar a los practicantes para que quitaran las banderas. Una mujer china fue vista con la policía, hablando constantemente con su teléfono celular.
15. Justo antes de la llegada de Hu, la presión para quitar las banderas se hizo más fuerte y aparecieron más policías de civil. Ellos comenzaron a agarrar las banderas. Los practicantes declararon que la ley argentina permite desplegar banderas y hacer manifestaciones. Los transeúntes le decían a la policía que había un grupo de izquierda manifestándose en la otra esquina, gritando y con grandes banderas contra la masacre en Tiananmen, y les preguntaban por qué la policía no los molestaba a ellos. Había un gran contraste entre los dos grupos, además había más de 100 policías con los practicantes de Falun Gong. Muchas personas le decían a la policía que se detuviera.
16. Cuando la policía comenzó a agarrar las banderas, los practicantes no las soltaron, entonces tres de ellos fueron detenidos y llevados a la comisaría, con las banderas todavía en sus brazos.
17. Ellos fueron mantenidos en un cuarto y se llevó a cabo el proceso normal de identificación. El jefe de la comisaría apareció para explicar que tenían órdenes de la oficina presidencial para quitar las banderas y esto debido a la presión ejercida por una coronel de la Armada china (probablemente la agregada militar de la embajada que fue vista hablando por celular en el parque).
18. El resto del grupo decidió permanecer en el parque para meditar y enviar pensamientos rectos. Luego el mismo grupo de chinos aparecieron en el parque y se acercaron a los practicantes, obviamente con una intención violenta. La policía detuvo al grupo de chinos y les impidió ingresar al parque. Luego un contingente de policía antidisturbios apareció y formó una pared alrededor de los practicantes. El grupo de chinos permaneció fuera del parque.
19. Los tres practicantes fueron liberados alrededor de las 12 de la noche.
Miércoles 14 de noviembre 2004
20. A la mañana siguiente, los 4 practicantes que fueron atacados enfrente del hotel fueron a una corte federal a presentar los cargos. Les dieron dos opciones y tiempo para decidir qué hacer. Luego fueron al congreso a repartir volantes. El mismo grupo de chinos estaba allí y comenzó a quitar los volantes a la fuerza, incluso cuando filmaba una cámara de TV. Esto fue hecho abiertamente enfrente del Congreso. Los transeúntes comenzaron a gritarle a los chinos: “¿Cómo pueden hacer esto en Argentina?”.
21. Más practicantes llegaron y dos canales de TV hicieron entrevistas delante del congreso.
Los informes de la prensa fueron bastante ciertos acerca de los hechos ese mismo día, pero a la mañana siguiente, las noticias cambiaron y la verdad fue tergiversada, se escribieron mentiras sobre los practicantes, todo obviamente fue manipulado por la Embajada china. Las terminologías usadas obviamente provenían de la embajada.
Todos los incidentes ocurrieron porque había gente que no quería –a cualquier costo- que Hu y la delegación viera las banderas que fueron vistas en el aeropuerto. Ya que los teléfonos de los practicantes están intervenidos, el grupo de chinos estaba organizado. Su objetivo era destruir las banderas porque, al comienzo, las autoridades argentinas no cooperarían con la quita de las banderas. Pero la presión se volvió tan intensa que las demandas de los oficiales de la embajada fueron transmitidas a la oficina presidencial, ya que la policía federal y la seguridad de Relaciones Exteriores no lo harían. Así que en la cena de la noche, la demanda de la embajada fue transmitida a la oficina presidencial y finalmente se accedió a quitar las banderas, pero no accedieron a quitarnos del parque.
Tenemos un intenso trabajo de clarificación de la verdad ahora, especialmente con los medios. Las autoridades, la policía, etc, ya saben la verdad, pero China se presenta a sí misma como Santa Claus llegando con regalos para esta parte del mundo: Brasil, Argentina y Chile.
Los dos oficiales de la Embajada china que planearon todo esto son dos personas: el agregado cultural, Zhang Yi, y la agregada militar.
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