Durante la Comisión de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas en Ginebra, los practicantes de Suiza celebran cada semana exposiciones contra la tortura en las calles con el fin de sacar a la luz la brutal persecución de Falun Gong en China por el grupo de Jiang. Esto crea un particular foco de atracción en el centro de la ciudad de Ginebra.
Numerosos transeúntes se paran, miran los paneles informativos y descubren las diversas formas de tortura utilizadas para forzar a los practicantes de Falun Gong a repudiar de sus creencias. Chocados por la brutalidad y locura de la persecución en China, la gente firma con sus nombres unos tras otros para apelar por el fin de estas inhumanas atrocidades cometidas por el Partido Comunista Chino.
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