Mi hijo tiene casi 5 años y ha estado estudiando Dafa por más de dos años. Él puede recitar casi todos los poemas de Hong Yin y del volumen II de Hong Yin. Cada día practica el ejercicio de “estaca parada”, “penetrando los dos extremos cósmicos”, lee un párrafo de Zhuan Falun y recita dos poemas de Hong Yin. Sin embargo, algunas veces se comporta muy mal cuando está con las personas comunes. Cuando miro adentro, encuentro que tengo todos los problemas que mi hijo tiene, aunque están más escondidos. Los he clasificado de la manera siguiente:
1. Mal humor: algunas veces, cuando algo no va como él quiere, mi hijo cierra los puños y grita muy fuerte.
Volviendo la mirada hacia mi interior, veo que en el trabajo soy muy capaz de pensar primero en los demás, pero en casa, muchas veces pongo énfasis en mí mismo. Para los trabajos de la casa y los que tienen que ver con validar el Fa, si mi esposa no hace las cosas como yo quiero, me enfurezco. Aunque a veces no digo nada, me quedo pensando en lo mismo por mucho tiempo. Cuando mi hijo se enfurece, algunas veces no me puedo controlar y le grito. En esos momentos no parezco un practicante.
2. Apego de escuchar halagos. Mi hijo siempre recibe halagos de otras personas y eso lo pone muy contento. Pero cuando la gente lo critica, inmediatamente se muestra descontento e ignora a esa persona. ¡El comportamiento de un niño realmente puede reflejar el del adulto! Mirando dentro de mí mismo, aunque actúo de una manera muy modesta entre la gente común, muchas veces pienso en los halagos que otros me han hecho.
3. Fuerte mentalidad de alardear y el apego de competencia. A mi hijo realmente le gusta alardear. Frecuentemente dice que es el mejor y que hace las mejores cosas. Mirando a mí mismo, cuando hago algo único, empiezo a considerarme diferente a otros. Cuando otros dicen cosas malas de mí, empiezo a pelear y no soy capaz de encarar mis errores de una manera calmada.
4. Estudiando el Fa y haciendo los ejercicios como tareas. Cuando mi hijo hace el segundo ejercicio, siempre me pregunta si ya se va a acabar. Cuando hace otros ejercicios con movimientos, casi siempre me pregunta cuántos ha hecho ya. Mirando hacia mi interior, cuando trato de memorizar el Fa y encuentro un párrafo con el que tengo dificultad, después de un rato, empiezo a ponerme impaciente y empiezo a hablar cada vez más rápido. Cuando me pongo impaciente, ¿no estoy tomando el estudio del Fa como una tarea? También tengo dificultad para levantarme cada mañana a las horas fijadas para hacer los ejercicios con los practicantes alrededor del mundo.
5. No cultivarme diligentemente. Antes de estudiar el Fa, mi hijo siempre mira la foto de Shifu, pone las manos juntas y dice algo. Lo que él dice es básicamente: “Shifu, voy a estudiar el Fa seriamente y a cultivarme bien la próxima vez, lo prometo”. Una vez le pregunté. “¿Por qué dices la próxima vez? ¿Por qué no estudias el Fa seriamente y haces los ejercicios ahora? ¿Estás tratando de aflojar?” Mi hijo siempre se ríe de mí: “¡sí, sólo puedo hacerlo diligentemente la próxima vez!” Las palabras de mi hijo realmente me confundían y me costó tiempo entenderlo. Un día, miré dentro de mí mismo y de pronto me iluminé. Nunca fui suficientemente diligente en hacer las tres cosas y no puedo alcanzar los requerimientos de Dafa. Siempre le digo al Maestro que lo voy a hacer mejor la próxima vez, y así la siguiente vez. Pero cuando llega el momento de superarlo, todavía no lo puedo hacer. Las mentalidades humanas y los deseos humanos que debo haber extinguido, todavía no se han extinguido. Cada día, cuando abro el libro tengo miedo de mirar la foto del Maestro. ¡Me siento tan avergonzado!
Hay otra razón importante detrás del mal comportamiento de mi hijo: no lo traté como un pequeño practicante. No compartí con él asuntos de cómo mejorar el xinxing y tampoco le dije cómo cultivarse. Todo lo que hacía era enseñarle a estudiar el Fa y a hacer los ejercicios. Cuando me di cuenta de esto, empecé a tratarlo como a un practicante. Cuando hay un problema, primero miro dentro de mí, “Papá no lo hizo bien y te gritó. Papá lo hará mejor la próxima vez”. Mi hijo me dice seriamente: “está bien, mientras te corrijas está bien, no hay problema”. “Pero justo ahora tú también te molestaste”, le dije. “¿No era eso algo que un pequeño practicante no debería hacer?” Mi hijo dice inmediatamente: “Sí, voy a corregirme yo también”. De esta manera una “tormenta” se apaga y los dos mejoramos nuestros xinxing. Aunque muchas veces todavía no podemos mantener nuestro xinxing y discutimos, después los dos podemos mirar adentro. Mi hijo y yo:
Estudia el Fa y obtén el Fa,
Comparte en el aprendizaje y comparte en la cultivación,
Haciéndolo todo de acuerdo a Él,
Si puedes hacerlo así, cultivación será”. (Cultivación sólida, Hong Yin)
Versión en inglés disponible en: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2007/11/29/91716.html
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