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El Sr. Reed Brody es el portavoz de Human Rights Watch, él representó a la organización como prueba internacional de los derechos humanos contra el ex dictador chileno Pinochet. Al enterarse de que la Audiencia Nacional española ha aceptado recientemente la acusación de genocidio y tortura en el juicio contra los cinco principales responsables implicados en la persecución a Falun Gong (ex jefe del Partido Comunista Jiang Zemin y Luo Gan, Bo Xilai, Jia Qinglin y Wu Guanzheng), dijo: "Es un paso muy importante".
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| El portavoz de Human Rights Watch, Reed Brody, en la actividad de conmemoración del Día Internacional de los Derechos Humanos |
Dijo: "Esta demanda se basa en el principio de la jurisdicción universal española. El derecho internacional está adaptado a una situación en la que la justicia no puede hacerse en el país de origen. Evidentemente, para el pueblo chino, China debe ser el lugar en la cual se lleve a cabo la justicia. Sin embargo, cuando es imposible de lograr este objetivo, entonces este principio puede ser utilizado por cualquier tribunal. Cuando el delito es suficientemente grave, se pueden tomar medidas. España tiene la presión del régimen comunista chino, pero los jueces españoles son independientes. Tratarán muy rigurosamente el caso aceptado. Es un progreso muy importante".
El Sr. Reed Brody siempre ha estado involucrado en la promoción de los derechos humanos y la justicia judicial. Ha participado en muchos movimientos jurídicos internacionales. Fue el abogado principal para las víctimas del dictador de Chad, Hissene Habre, cuando este último hizo frente a la justicia en Senegal. En cuanto al hecho de que los practicantes de Falun Gong utilizan la ley internacional para traer a los principales culpables del régimen comunista chino a la justicia, y terminar así con las violaciones de los derechos humanos, dijo: " Las víctimas tienen el derecho a apelar a la justicia por los medios judiciales. Desgraciadamente hay demasiadas injusticias en todas partes y muy pocos lugares para corregirlos. De numerosas personas, entre los cuales Falun Gong, las víctimas tibetanas y otras, son excluidos del tribunal de su propia nación. Por consiguiente, buscan justicia en el extranjero. Pienso que el caso español transmitió un mensaje muy importante. No sólo les aporta un cierto consuelo a las víctimas, sino que les abastece también un Tribunal de Justicia. Algo imposible de encontrar para las víctimas en su propio país. Abiertamente pudieron expresar sus sufrimientos y pedir justicia"
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