Un paquete precioso y especial

Un pequeño paquete se hizo aún más especial por haber sido pasado como contrabando fuera de la prisión por alguien que arriesgó su propia seguridad. El valor y significado del paquete es mucho más profundo que miles de palabras.

Los practicantes dentro de una prisión confiaron a una persona para sacar al mundo exterior un paquete, salvando para ello las medidas de seguridad y las vigilancias. Resultaba intimidante el hecho de sacar este precioso paquete no más grande que una caja de comida, fuera de este lugar de detención, estrechamente vigilado.

Al abrir dicho paquete forrado de varios envoltorios de papel, descubrimos algunas copias manuscritas de Zhuan Falun, con extractos de conferencias y artículos más recientes publicados por el Maestro. Nueve libretas juntas forman Zhuan Falun. Cada una de las nueve conferencias está en una libreta separada, y todas ellas tienen la misma medida. Cada libreta tiene la medida de un cuarto de hoja. Cada uno es envuelto con su propia cubierta de papel y minuciosamente cosido otra vez utilizando una aguja e hilo. Hay también algunas libretas más pequeñas, de cortes variados, conteniendo partes manuscritas de las conferencias y los artículos más recientes del Maestro, así como algún poema del Maestro, Hongyin volumen II. ¡Es verdaderamente sorprendente abrir y leer cada libreta! Cada carácter sobre cada una de las páginas está cuidadosamente escrito. Cada raya de cada carácter consigue ser a la vez delicada y poderosa. Cada palabra muestra la firmeza y el corazón sincero de los practicantes frente al Maestro y frente a sus propias vías de cultivación personal.

Las personas que están detenidas en estas prisiones saben el trabajo que cuesta encontrar una pluma, o un pedazo de papel decente para escribir. Las condiciones de la prisión son terribles y el ambiente extremadamente cruel. El hacinamiento es terrible y los presos deben aprender a tolerar todo tipo de registros y de indignidades que regularmente les son infligidos. Se les obliga a cumplir trabajos muy duros y el personal de las prisiones busca constantemente excusas para perseguirlos. En tales circunstancias, los practicantes de Falun Dafa todavía persisten en su estudio de la Ley, recitando la Ley, y copiando la Ley. Existe un poder que puede quebrantar este tipo de espíritu indomable.

Cuando la persona que transportó el paquete fuera de la prisión se enteró de la verdad acerca de Falun Dafa, se volvió muy firme en su decisión de hacer este trabajo. Aunque consciente de la gravedad del riesgo que tomaba, se mostró digno de la importante tarea que le fue confiada. Después de haber conseguido sacar el paquete de la prisión, tuvo que viajar cientos de kilómetros y vencer todavía muchas dificultades antes de entregarlo finalmente al practicante de Falun Dafa del mundo exterior. Haciéndolo, su excitación era manifiesta y todavía repetía, "¡Sé que Falun Dafa es bueno! ¡Sé que Falun Dafa es bueno! "