Acerca de no guardar rencor contra de otros

No guardar rencores hacia otros, y en cambio tratarlos amablemente es una virtud tradicional china. Esto significa que no deberíamos prestar atención a los errores de otros o a sus opiniones diferentes y no deberíamos criticar sus insuficiencias. En lugar de esto deberíamos tratarlos amablemente. No tener en cuenta los errores de otros es una virtud noble.

Cuando Confucio llegó al estado de Wei durante su viaje por diferentes estados, el Duque Ling, el monarca de Wei, le trató en principio con un gran respeto. Él, personalmente, saludó a Confucio en la entrada a la capital. Confucio encontró que el Duque Ling era un monarca que respetaba a los sabios, decidió quedarse en Wei.

Un día el Duque Ling salió del palacio. Su esposa y él mismo subieron en un vehículo y dejó a los eunucos sentarse a su lado. Pero hizo subir a Confucio en otro vehículo detrás de ellos. Estuvieron dando la vuelta a la ciudad. Confucio se sintió confuso y dijo a sus estudiantes: "Jamás vi a alguien que quería parecer virtuoso comportarse tan mal". En ese momento, Confucio había estado durante mucho tiempo en Wei y nunca había sido colocado en una posición mucho más alta. Dejó Wei.

Más tarde, cuando Wei experimentó un golpe de Estado, Ranqiu, un alumno de Confucio, le preguntó Zigong, otro estudiante: "¿El Maestro ayudará al Rey Wei?" Zigong respondió: "No sé, pero déjame preguntarle al Maestro".

Zigong entró en la habitación y le preguntó a Confucio: "¿Qué tipo de personas fueron Boyi y Shuqi?" Confucio respondió: "Ellos eran sabios".

Zigong todavía preguntó: "¿Retenían el rencor?" Confucio respondió: "Buscaban la humanidad y recibieron, por lo tanto, la humanidad. ¿Cómo podrían ellos guardar rencor?"

Después de la conversación, Zigong le dice a Ranqiu: "Parece que el Maestro va a ayudar a Wei. No muestra ningún resentimiento hacia el Rey de Wei".

Traducido del Inglés: http://www.pureinsight.org/pi/index.php?news=4254