El 08 de junio de 2013, los practicantes canadienses realizaron una manifestación frente a la Galería de arte de Vancouver en Canadá, para crear conciencia sobre la persecución de Falun Gong en China. Varios practicantes relataron sus experiencias sobre ser encarcelados y torturados en los campos de trabajos forzados chinos.
Los transeúntes conocen los hechos sobre la persecución a Falun Gong en China |
Los practicantes muestran los ejercicios frente a la Galería de Arte de Vancouver |
Faltó poco para ser víctima de la sustracción de órganos a personas vivas
Jing Tian de la provincia de Liaoning, China, contó cómo ella y toda su familia habían sido perseguidos en China por practicar Falun Gong. Su hermana menor, Jing Cai, fue condenada a 13 años de prisión en 2003, su hermano menor, Yu Jing, a 10 años y su madre, Chen Jun, a tres años.
Su hermana salió en libertad condicional médica después de haber sido torturada casi hasta la muerte. Las dos hermanas fueron finalmente rescatadas y consiguieron asilo político en Canadá. Su hermano fue puesto en libertad en diciembre de 2010 y su madre murió en 2011, después de haber sido torturada brutalmente.
Jing Tian habla sobre su experiencia en un campo de trabajo chino |
El esposo de la Sra. Jing, Chen Song, fue encarcelado dos veces en tres años en el centro de lavado de cerebro Zhangshi en la ciudad de Shenyang. Una vez, el guardia le dio más de 20 descargas con una porra eléctrica durante el día. La piel del Sr. Chen se quemó y ulceró gravemente.
La Sra. Jing dijo que ella y su hermana fueron obligadas a hacerse exámenes de sangre en cinco ocasiones. Después de saber sobre la práctica de la cosecha de órganos a los practicantes de Falun Gong con vida, realizada por el régimen chino, ambas comprendieron lo cerca que estuvieron de compartir la misma suerte.
Otra historia de tortura
Tang Feng de la provincia de Jilin, compartió cómo fue arrestado, detenido y torturado durante siete meses por practicar Falun Gong. Él describió cómo fue golpeado, esposado, privado de sueño, le colocaron grilletes, le dieron descargas con bastones eléctricos en su área genital, rociado con ají picante, quemado con cigarrillos, alimentado a la fuerza y confinado a una silla de hierro. También le introdujeron a la fuerza humo por la nariz.
Su estado se deterioró rápidamente hasta que se demacró, los músculos de las piernas se habían atrofiado y no tenía sensación de la cintura para abajo.
El Sr. Tang dijo que había presenciado la tortura hasta la muerte de muchos practicantes.
Conocer los hechos sobre la persecución es importante
Xin Di fue encarcelada durante tres años en el segundo campo de trabajos forzados para mujeres en la provincia de Shandong. "Yo estuve encerrada en una celda de aislamiento durante 13 meses, privada de sueño durante 40 días seguidos, obligada a estar de pie durante nueve días seguidos y no se me permitía usar el baño o lavarme las manos. Como resultado de ello, estuve paralizada durante más de seis meses".
"Los guardias alentaron a otros presos a golpear mis piernas y articulaciones con bastones de madera hasta que no me podía mover", explicó. "Mis brazos estaban todos cortados y con contusiones al ser arañados por los reclusos con las uñas afiladas. A pesar de haber sido torturada de esta manera, yo todavía tenía que hacer a diario 17 horas de duro trabajo".
La Sra. Xin dijo que los guardias la forzaron a hacerse un examen de sangre completo y una ecografía de los riñones y el hígado. En 2002, un guardia le dijo que iban a trasladarla a un lugar indefinido y que no iba a volver.
Unos días más tarde, le dijeron que no iban a cambiarla porque su familia la visitaba con frecuencia en la prisión y los guardias no querían ninguna reacción de ellos si no regresaba.
"El cuidado de mi familia y su preocupación por mí me salvó de convertirme en una víctima de la sustracción de órganos", afirmó la Sra. Xin.
Levantando conciencia internacional
La portavoz de la Asociación de Falun Dafa de Vancouver, Sra. Zhang, instó a la comunidad internacional a prestar especial atención a la persecución de los practicantes de Falun Dafa en China, sobre todo lo relacionado con el tema de la sustracción de órganos a personas con vida.
La Sra. Zhang dijo que iba a presentar un montón de peticiones firmadas para pedir al gobierno canadiense para que hable a favor de los practicantes de Falun Dafa en China porque están siendo perseguidos por sus creencias.
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